La aprobación del millonario rescate a la aerolínea chavista Plus Ultra por parte del gobierno de Pedro Sánchez ha sido denunciada por la delegación de VOX en el Parlamento Europeo ante las instituciones europeas, alegando la dudosa legalidad de la ayuda por parte del gobierno español al régimen narcocomunista venezolano. En un documento oficial enviado a la Comisión Europea, el jefe de la delegación de la formación verde, Jorge Buxadé, pone de manifiesto la falta de medidas restrictivas a Venezuela por parte de la Unión Europea y exige un papel más decisivo para “evitar la injerencia de gobiernos totalitarios”.
El Ministerio de Hacienda español, que es el responsable del fondo del rescate, defendió la postura del gobierno de Sánchez y excusa como “estratégico” el movimiento del gobierno por la importancia del transporte aéreo en España, pero las estadísticas de Aena confirman que la compañía aporta menos del 1% de las conexiones aéreas a nuestro país. En la pregunta oficial a la Comisión, Buxadé exige actuación institucional ante la inyección millonaria a una compañía que se ha demostrado que tiene vínculos con el régimen totalitario de Nicolás Maduro y subraya la falta de moralidad de la decisión en un momento en el que la pandemia “ha abandonado a más de 200.000 autónomos y pymes españolas”.
En esta línea, el eurodiputado hace mención también al escándalo del caso Delcy, una flagrante violación a las medidas restrictivas comunitarias a Venezuela por parte del gobierno español que se materializaron al recibir a la vicepresidenta de facto de Venezuela, Delcy Rodríguez, en una recepción oficial liderada por el ministro José Luis Ábalos: “el séquito de la señora Rodríguez trasladó dos carros con maletas a la zona pública del aeropuerto sin pasar ningún control de aduanas” denuncia Buxadé relacionando los numerosos casos sin coincidencias en los que el gobierno español de Pedro Sánchez ha colaborado con la dictadura venezolana.
Tras este último caso de ayuda multimillonaria al régimen comunista venezolano, el jefe de la delegación de VOX en el Parlamento Europeo exige información y medidas a la Comisión, cuestionando los mecanismos de la institución para “evitar que los fondos europeos puedan acabar en manos extranjeras en el caso de que gobiernos o poderes extranjeros puedan embaucar a miembros corruptos de los gobiernos de los Estados Miembros”.