VOX avisa: Entre traidores anda el juego, solo que el miedo les entra cuando uno de la banda decide dejar de hacer el teatro

Comunicado tras las declaraciones de la exministra Trujillo sobre Ceuta y Melilla

En VOX Ceuta no nos hemos visto sorprendidos por las declaraciones realizadas por la exministra Trujillo. La misma que, hasta hace muy poco, ha venido desempeñando funciones diplomáticas en la embajada de España en Marruecos y que se encontraba participando en Tetuán en unas jornadas junto al también socialista expresidente Zapatero.

El teatro dura mientras se está en el cargo institucional, o se aspira a el. Tras dejarlo, aparece la realidad que subyace en el pensamiento de cada uno de estos políticos que forman parte de la izquierda de este país. Una izquierda profundamente antiespañola, filoetarra, islamizante, marroquinizadora y promarroquí.

En este caso, la exministra Trujillo ha dicho lo que ya pensaba cuando desempeñaba las más altas funciones de representación del estado español, solo que sin manifestarlo contribuía a ese mismo fin, que no era otro que el de coadyuvar con su acción política a empujar cada día un poquito más a Ceuta y Melilla hacia las garras de Marruecos. Hace no mucho vimos como otro promarroquí que ejercía de viceconsejero del gobierno de Melilla por el cupo de Aberchan, prestaba servicios de guardaspaldas y compañero de borracheras del sátrapa marroquí. Otro más en la lista de esos españolazos que con tanta vehemencia defiende Vivas y a los que desde VOX solemos señalar abiertamente mientras hacen su teatro.

Desde VOX Ceuta lo hemos venido denunciando desde hace mucho tiempo. La existencia de grupos promarroquíes que abarca desde el PSOE a MDyC pasando por Caballas-Ceuta Ya, quienes se han visto retratados ante tan traidora declaración de una de los suyos ya sea a nivel de militancia e ideológico. Alcanzando solo a calificar timoratamente sus declaraciones como «desafortunadas» y poco más. Y deseando que amaine el temporal lo más pronto posible.

Por parte de las instituciones del Estado. Con un traidor profesional llamado Pedro Sánchez a la cabeza, tampoco ha habido reacción y de haberla en las próximas horas tampoco será excesivamente encendida. No sea que Marruecos se altere y vuelva a subir la intensidad de su chantaje.

Y, por último. tampoco nos es extraña la reacción impávida de Vivas, hablando de deslealtades y no de traiciones. Sorprendido, o más bien apenado, porque no se ha visto correspondida esa cobarde «lealtad institucional» con la que embadurna su habitual colaboracionismo con sus socios de traiciones.