AYÚDANOS A ELIMINAR MILES DE CARGOS POLÍTICOS
VOX no pedimos tu ayuda para sustituir a los políticos actuales por políticos de VOX. Porque los que estamos en VOX no queremos sustituir a los políticos actuales por políticos de VOX. Lo que queremos es eliminar a miles de cargos políticos. Porque los que estamos en VOX somos ciudadanos, como tú. Y como tú, estamos hartos de pagar la mitad de lo que ganamos para mantener a miles de políticos, a sus enchufados, sus amigos y familiares, y todo el gasto que todos ellos conllevan en viajes, dietas, coches oficiales, edificios oficiales, y un larguísimo etcétera. Por eso lo que te pedimos es que nos ayudes a eliminar a miles de cargos políticos. Porque sólo así se podrán bajar los impuestos, el gasto público, la deuda pública… y sólo así podremos dejar de dar la mitad de lo que ganamos en impuestos.
Los políticos de los partidos que están en el poder, quieren seguir en el poder. Los políticos de los partidos que no están en el poder, quieren sustituir a los que están en el poder. Los políticos de VOX, no. Los políticos de VOX quieren librar a los españoles de esa tremenda carga que supone tener que mantener a miles de políticos innecesarios, con todos los gastos que ello conlleva. Pero no lo podemos hacer sin tu ayuda.
La lista de políticos y enchufados que proponemos eliminar, es esta:
- Senado: 266 senadores.
- Comunidades autónomas: 17 cámaras de representación, con 1.268 políticos autonómicos, más 12.800 cargos ejecutivos de libre designación, cargos en organismos públicos autonómicos, asesores y personal de confianza.
- Ayuntamientos: reducción del 50% de los alcaldes y concejales existentes que afectaría a 34.000 políticos municipales y a más de 33.600 cargos en organismos públicos locales, asesores y personal de confianza.
En total, nuestra propuesta supone eliminar un número aproximado de 81.934 cargos políticos.
Por supuesto, no vamos a despedir a ningún funcionario. Aquellos funcionarios que dependan de organismos que sean suprimidos, conservarán su plaza, simplemente pasarán a depender orgánicamente de otros organismos.
Por supuesto, no vamos a reducir en absoluto los servicios en los ayuntamientos y comunidades autónomas cuyas alcaldías y gobiernos autonómicos eliminemos. Los que prestan servicios a los ciudadanos no son los políticos, sino los funcionarios y las empresas contratadas para ello. Por eso, al eliminar las comunidades autónomas y miles de ayuntamientos no se reducirán los servicios en esas comunidades autónomas y ayuntamientos, simplemente los vecinos pasarán a pagar sólo por los servicios que obtengan, sin tener que mantener a miles de políticos y enchufados que no dan ningún tipo de servicios. Y los servicios pasarán a ser coordinados desde un lugar distinto. Además, al no tener que mantener a todos esos miles de políticos, habrá más dinero para prestar servicios a los ciudadanos.
Por supuesto, no desaparecerán los pueblos cuyas alcaldías eliminemos. Los pueblos seguirán existiendo como tales, manteniendo su identidad tradicional. Lo que no existirán son los cargos políticos que viven actualmente a costa de los vecinos de esos pueblos.
Por supuesto, vamos a echar a todos los asesores, consejeros, y demás enchufados de todos los cargos políticos que eliminaremos si decides ayudarnos a eliminarlos, porque ya está bien de que en España trabajemos para mantener a políticos y amigos de políticos.
Además, hay que tener en cuenta que esos políticos y enchufados que pierdan sus cargos gracias a VOX, no irán al paro, sino que se convertirán en una gran fuente de riqueza para España. Por una parte, al no ser trabajadores productivos, actualmente no ocupan puestos de trabajo, sino que son simplemente un gasto. Un gasto muy importante que tienen que pagar los trabajadores y empresarios españoles, con su trabajo. Al no tener que mantenerles, esos trabajadores y empresarios dispondrán de más dinero, lo que dinamizará la economía española, creando riqueza. Pero, además, esos políticos y enchufados son gente muy preparada, lo que justifica sus actuales altísimas remuneraciones. Así, al quedarse sin sus puestos pagados con dinero público, inmediatamente pasarán a ser contratados por empresas privadas, o formarán ellos mismos empresas, pasando de ser una carga para los españoles, a convertirse en una fuente de riqueza para España.
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