A finales del pasado mes de mayo, los hosteleros de la provincia de Málaga trasladaron al Gobierno sus reivindicaciones para salvar al sector, que se encuentra en una situación límite debido a las consecuencias de tres meses de parón. Unos días después, Patricia Rueda, diputada de VOX por Málaga en el Congreso y portavoz en la Comisión de Turismo, presentaba, junto a otros cinco diputados, una Proposición No de Ley (PNL) que recogía gran parte de las peticiones de los hosteleros.
El escrito presentado por Rueda denunciaba que, desde la declaración del estado de alarma, “apenas han existido medidas concretas para este golpeado sector” y ejemplificaba: escasas previsiones relacionadas con las fases de desescalada, que sólo han generado incertidumbre. Un sector, además, del que dependen 800.000 familias malagueñas.
En este sentido, la diputada denunció, durante la comparecencia del director Ejecutivo de la Organización Mundial del Turismo (OMT), Manuel Butler, el caos en el comienzo de la desescalada. “El 8 de marzo -viernes- estuve hablando con hosteleros de Málaga, quienes todavía no sabían si iban a abrir el siguiente lunes porque no se habían dado a conocer las condiciones”, denunciaba Rueda.
Los hosteleros de Málaga pedían, por su parte, “mayor claridad y transparencia al Gobierno para poder planificar la reapertura del sector”. “No quieren que se vuelvan a suceder situaciones que se dieron en semanas anteriores, en las que los hosteleros no pudieron tomar las decisiones adecuadas por no saber si podrían abrir sus negocios hasta unas horas antes”, explicaban.
Respecto a la PNL, Rueda demandaba extensibilizar y flexibilizar los ERTES de suspensión de contrato o reducción de jornada por el Coronavirus más allá del estado de alarma. Y derogar las cláusulas de los ERTES con relación al mantenimiento del empleo en los seis meses finales a la reanudación de la actividad.
En la misma línea, la Asociación de Hosteleros de Málaga (Mahos) reclamaba la “flexibilización de los ERTES, con el objetivo de conseguir una prórroga para el sector, dada la lenta recuperación que van a experimentar sus negocios”.
Otra de las demandas de la entidad malagueña era “campañas que trasladen confianza a los consumidores sobre la seguridad de los establecimientos frente a la Covid-19. Por otro lado, reclaman que las medidas adoptadas para relanzar el sector se mantengan en el tiempo hasta lograr la total recuperación”. Una petición que fue trasladada por el GP VOX en la Cámara Baja exactamente de la misma forma.
Rueda solicitaba también la “creación de microcréditos con tipos de interés bajos, con importes cerrados y por niveles”. La diputada ha repetido la palabra “liquidez” en todas sus intervenciones durante la pandemia. Así, en la PNL que presentaron desde el GP VOX se reclamaron “establecimientos de nuevos avales públicos y líneas de financiación, con tipos de interés inferiores al 0,25”. En coincidencia con la entidad malagueña, que reclamaba “microcréditos, en torno a 25.000 de rápida concesión, así como nuevas líneas de financiación”.
Tanto Mahos como el GP VOX solicitaron la moratoria en el pago de hipotecas. Exenciones fiscales y tasas municipales durante el periodo de inactividad.
Respecto a los aforos, la entidad malagueña solicitaba fijar la distancia de seguridad como criterio para determinar el aforo de los establecimientos, otra petición que fue recogida por el GP VOX.
