Manuel Mariscal

Manuel Mariscal explica el plan de VOX para salvar TVE: ‘Queremos cerrar tele-Sánchez, pero no TVE’

El portavoz de VOX en la comisión de RTVE, Manuel Mariscal, ha expuesto el plan para que la televisión pública deje de costar más de 1.000 millones de euros al año a los españoles y ser el altavoz de Pedro Sánchez. En su lugar, VOX propone la vuelta de la publicidad para que sea autosuficiente y la defensa de España en aquellos lugares gobernados por el separatismo.

«Hoy TVE es una televisión arruinada, sin audiencia y con unos trabajadores que sufren al ver que la televisión de todos se convierte en la de unos pocos. Los tertulianos que analizan la actualidad en TVE estigmatizan continuamente al tercer partido. Nunca hay un tertuliano que apoye o, al menos, no critique las propuestas que han votado 4 millones de españoles», ha explicado.

Mariscal ha denunciado, asimismo, que TVE «se haya convertido en la televisión del Gobierno, pero también en la televisión de sus amigos: ahí están los 600 millones de euros que TVE ha desviado a productoras privadas desde 2016 hasta 2019 para que los Roures y los Buenafuente de turno hagan el trabajo que no les dejan realizar a los profesionales de TVE. «TVE se ha convertido en un cajero automático para muchas productoras privadas y la excusa perfecta para alimentar económicamente al duopolio televisivo».

A continuación el portavoz de VOX ha asegurado que su partido pretende que se fomenten los valores constitucionales en TVE en calidad de servicio público, «en especial en aquellos centros territoriales que se ubican en CCAA gobernadas por partidos separatistas que vulneran la constitución con carácter habitual».

«En VOX queremos cerrar tele-Sánchez pero no TVE, es decir, queremos que la cadena pública deje atrás las manipulaciones, los ceses y nombramientos partidistas y las entrevistas-masaje para blanquear a terroristas y separatistas y los Aló presidente para  promocionar a Pedro Sánchez».

En definitiva, Mariscal ha afirmado que VOX quiere una cadena pública que no nos cueste a los españoles «más de 1.000 millones de euros al año, sino que con la vuelta de la publicidad sea autosuficiente y sea una televisión que pase de números rojos a números verdes».