“A todos nos gustaría poder crecer cerca de nuestros padres y verlos envejecer. No estamos pidiendo tanto”. Estas han sido las palabras que Santiago Abascal, presidente de VOX España, ha dedicado a los jóvenes que este viernes han acudido a la Plaza Mayor de Palencia en un mitin en el que tanto el presidente, como el candidato a la presidencia de Castilla y León, Juan García Gallardo, han querido recordar a todos aquellos que se han tenido que ir de su ‘patria chica’ en busca de nuevas oportunidades.
“Han elegido no dar un futuro a la juventud que lo único que quiere es poder tener una familia, un trabajo y una vivienda. Pero como no les dan ese futuro tienen que traer a inmigrantes ilegales diciendo que van a ser ellos los que nos van a pagar las pensiones cuando en realidad lo único que reciben son ayudas sociales. Ellos han elegido inmigración, nosotros natalidad. Que los niños que nacen aquí, vivan aquí”, ha asegurado Santiago Abascal.
El exilio no es inevitable
En esta línea, Abascal ha insistido en que VOX también apuesta por una industrialización en la región, pero también por defender los intereses de los ganaderos y de los agricultores ante el progresivo abandono del campo. “El exilio de los jóvenes no es inevitable. Ocurre porque hay decisiones políticas que llevan a ello”, ha añadido.
Además, el presidente de VOX ha hecho un repaso de todos los objetivos que persigue la Agenda 2030, objetivos que defiende tanto el PP como toda la izquierda en bloque y que pasan por una “religión climática” que se opone a nuestros agricultores. “Ellos siempre están de acuerdo en lo importante. Mejor dicho: en lo peor. En esas políticas de género, en la memoria histórica,(…) en repartirse los cargos del Tribunal Constitucional o en apoyar los estados de alarma inconstitucionales”, ha asegurado.
Por todo ello, Abascal ha recalcado que este tipo de alianzas en materias como la energética provocan que “las facturas de la luz y el gas vayan para arriba por culpa de sus políticas y de sus supersticiones ideológicas”.
Familias Fuertes
Por su parte, el candidato de VOX a la Presidencia de Castilla y León ha sido contundente: «La región necesita familias fuertes, educación libre y poner fin al expolio fiscal a las empresas y trabajadores».
García-Gallardo ha desgranado alguna de las propuestas, como la referida a la familia, donde ha destacado la importancia de la unión y fortaleza de la misma, porque “no está escrito que los jóvenes tengan que marcharse, que no puedan formar una familia en Castilla y León y que los abuelos no puedan ver crecer a sus nietos”. Por ello, “hay que hacer frente a la despoblación para que se queden todos aquellos que quieren quedarse, pero también para que los que quieren volver lo hagan”.
Brecha maternal
Y para ayudar a las familias es imperativo, ha explicado, terminar con “la brecha maternal y con la penalización que sufren las mujeres cuando se convierten en madres, por lo que la Junta tiene que asumir los costes de las bajas laborales». Y no se ha quedado ahí: «Hay que bonificar el acceso a la vivienda y a los suministros básicos, especialmente a las familias numerosas». Y ha continuado explicando que se deben entregar ayudas directas, y progresivas, en función del número de hijos”.
En materia educativa, García-Gallardo ha reivindicado «una educación libre». Y ha apelado a la necesidad de «evitar que el consenso progre lo convierta en un foro para sus dogmas, sus imposiciones, en las clases de los más pequeños”. Para lograrlo, VOX defiende la “eliminación de toda normativa autonómica que introduzca contenidos ideológicos en los planes educativos, sacando cualquier tipo de adoctrinamiento en las aulas y garantizando el derecho de las familias a educar a sus hijos en libertad”.
Expolio fiscal
Tampoco ha obviado el expolio fiscal al que está sometida la región. “Los castellanos y los leoneses llevamos mucho tiempo sosteniendo a la junta con nuestros impuestos, con el sudor de nuestra frente”, y deseando que “la Administración se ponga al servicio de los ciudadanos para que los frutos de su trabajo vayan destinados a reforzar los servicios públicos que tanto necesita nuestra tierra y no como el consenso progre, que hasta ahora ha priorizado siempre el estado de bienestar de los políticos a costa de las familias y trabajadores de esta tierra”, ha apostillado.
Y ha apostado por “bajar los impuestos a empresas y trabajadores, eliminar el confiscatorio y abusivo impuesto del patrimonio, aliviar a las pymes y autónomos, a las familias, pero todo ello sin aumentar la deuda». Una deuda que, ha advertido, «es una condena en diferido que el consenso progre ha dejado como legado a los castellanos y leoneses”. Algo que han hecho, según el propio García-Gallardo dice “para mantener sus privilegios”.