Pelayo reprocha al Senado que admitiera la ley de amnistía: «Jamás debió tramitarse»

El portavoz de VOX en la Comisión de Comunidades Autónomas del Senado, Ángel Pelayo, ha reprochado hoy a la Mesa del Senado que haya admitido a trámite la Proposición de Ley Orgánica de amnistía para la normalización institucional, política y social en Cataluña. A su juicio, «jamás debió tramitarse por las Cortes Generales, y que por tanto tampoco debió ser admitida por los órganos de gobierno de esta Cámara, por razones  jurídicas, políticas y morales».

Durante el debate del informe acerca del contenido autonómico de la ley de amnistía, Pelayo ha recordado las «innumerables organizaciones e instituciones, españolas y de ámbito internacional» que han mostrado su «honda preocupación, y su absoluto rechazo», a esta iniciativa legislativa. Y ha hecho hincapié en las opiniones manifestadas por los letrados de ambas Cámaras de las Cortes Generales, y también del órgano de gobierno del Consejo General del Poder Judicial. Unos escritos que «subrayan que la Constitución Española excluye expresamente los indultos generales, lo cual evidencia la exclusión de la hipótesis de una amnistía».

También se ha referido al presidente del Gobierno, y a su actitud «inmoral», una acusación que ha justificado después de que el jefe del Ejecutivo haya aceptado «asegurar la  impunidad de conductas criminales a cambio de votos siempre». Pero ha ido más allá, porque «cuando las acciones delictivas que se pretenden condonar se han dirigido contra la propia existencia de la comunidad política nacional, el nivel de degradación moral supera sus propios límites».

Política sin parámetros éticos

A juicio del senador Pelayo, «es innato en Pedro Sánchez y en el Partido Socialista una forma de hacer política separada por completo de cualquier parámetro ético o de compromiso con sus propias manifestaciones». Algo que demuestra Sánchez después de haber asegurado que su Gobierno no aceptaría la amnistía: «Señorías, fue el propio Pedro Sánchez quien, no sólo en sede parlamentaria, sino ante todos los españoles, en una entrevista en televisión».

También ha considerado como «el colmo del cinismo» que en su redacción, la ley de amnistía aluda «en interpretación sesgada, al Convenio de Roma, para revestirlo de Derechos Humanos y de dignidad humana, un ropaje humanitario que es absolutamente falso, y que pretende dejar sin castigo las agresiones físicas con heridas irreversibles a muchas personas en estas regiones».

Además, la Proposición de Ley de Amnistía «lleva al límite al ya de por sí trato desigual e injusto que el actual Estado Autonómico que provoca un ambiente propicio a futuros enfrentamientos entre regiones, y también entre ciudadanos, que no son tratados como ciudadanos iguales». El senador ha insistido en que no es, como cínicamente pretende el Gobierno, una vía de normalización política en Cataluña, sino todo lo contrario; «como ha dicho el señor Aragonés esta mañana, buscan la secesión, la independencia de Cataluña y por supuesto la amnistía como paso previo».