El diputado de VOX por Alicante, Eduardo Ruiz, ha intervenido durante el debate del proyecto de ley por la que se regulan los servicios de atención a la clientela.
Ruiz ha comenzado su intervención definiendo la esencia del actual Gobierno: «maniqueísmo, es decir, que tiene tendencia a reducirla a una oposición radical entre lo bueno y lo malo, sin zonas grises ; el etiquetismo, es decir, que tiene tendencia a atribuirse la legitimidad de otorgar carnets o etiquetas de buenos y malos a su antojo; y el sentimentalismo, es decir, lleva a cabo las dos conductas anteriores y todas las demás excluyendo cualquier posibilidad de debate racional».
Tras ello, el diputado del GP VOX ha continuado criticando el proyecto de ley del Gobierno cuyo interés radica en «obligar a todas las empresas, etiquetadas de malas, a crear departamentos o servicios de atención al cliente, además de regular sus características, materias y tramitación«.
Ruiz ha asegurado que lo que se demuestra en este proyecto de ley es «la desconfianza hacia el sistema de empresa y de economía de mercado». Luego ha continuado: «La práctica lo que demuestra es que en el caso que las PYMES, que representan más del 90% del total de empresas en España, es la atención directa del empresario la mejor manera de crear un sistema gratuito, eficaz, universalmente accesible, inclusivo y no discriminatorio, en palabras de este Proyecto de Ley. Cumpliéndose además que sea personalizado y prestado por personas formadas para ello. ¿Quién mejor que el empresario para ofrecer una atención así? «.
El diputado del GP VOX ha asegurado que el proyecto ley «contiene elementos positivos», aunque ha aclarado que se echa en falta «una regulación menos lesiva para nuestras PYMES y más respetuosa con su capacidad de autoorganización«.
Finalmente, Ruiz ha cargado contra el contenido «sectario» de la ley que «habla de ‘clientela’, en lugar de “cliente”, no puede ser más impersonal y excluyente a pesar de que diga buscar lo contrario. Señorías del partido popular: tomen nota porque esto también forma parte del trágala de la ideología de género que denunciamos desde VOX«.