La portavoz de VOX en la comisión de Presupuestos y portavoz adjunta de la Comisión de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Inés Cañizares, ha lamentado la gestión del ingreso mínimo vital que anunció el Gobierno al inicio del estado de alarma, durante el debate del Real Decreto-ley 39/2020, de 29 de diciembre, de medidas financieras de apoyo social y económico y de cumplimiento de la ejecución de sentencias.
«Si hablamos de la gestión que ha hecho el gobierno sobre el IMV, podríamos resumirlo en una frase: las promesas no llenan el estómago. El pasado 29 de mayo el Consejo de Ministros afirmó que el IMV llegaría a 850.000 hogares en los que viven 2,3 millones de personas, con especial incidencia en los hogares en los que viven menores. «Pero lo que no dijeron es cuando sucedería todo eso, es como el chiste, llegará, pero hoy no, mañana».
Cañizares ha recordado que el 10 de junio Iglesias y Escrivá «subieron a esta Tribuna para hablarnos de llenar neveras, erradicar la pobreza y la exclusión social. Hoy 7 meses más tarde, el 80% de esas neveras siguen vacías y tenemos a más españoles en riesgo de pobreza, si sumamos los que se han quedado sin trabajo en estos meses, porque el Gobierno les ha obligado a cerrar su bar, o los que ya no pueden sobrevivir porque no venden ni un calcetín».
«¿Dónde está el éxito de la vacuna contra la pobreza que el señor Iglesias anunció a bombo y platillo? Las medidas no son promesas, porque para que sean exitosas deben materializarse y conseguir sus objetivos. Ustedes toman medidas en clave de improvisación y de marketing político», ha añadido.
En este sentido, la portavoz de VOX ha lanzado la siguiente pregunta: «¿Creen que es de recibo, que hace 7 meses aprobaran el IMV y se les olvidara incluir en la norma lo relativo a la tributación? Esta desidia y falta de diligencia cuesta dinero a los españoles: hoy Sesión en el Congreso, luces encendidas, más tirada en el BOE, en definitiva, dinero del contribuyente en arreglos políticos».
Sobre el Decreto Ley, que VOX ha votado favorablemente, Cañizares ha asegurado que está alineado con la dinámica legislativa de este Gobierno, «que aprovecha la crisis sanitaria, económica y social para regular por RDL, cuestiones ajenas a la misma».