En la Comisión de Seguridad Nacional, el diputado de VOX Manuel Mariscal ha comenzado su intervención rememorando como ‘nacieron’ las agencias de verificación, allá por el año 2013 en el programa de La Sexta, llamado El Objetivo, del cual formaba parte la compareciente y actual cofundadora de “Maldita.es”, Clara Jiménez. Tras recordar la trayectoria de Clara Jiménez, el vicesecretario nacional de comunicación de VOX ha mostrado varios tuits de Maldita.es en los que se calificaba como bulo que el coronavirus había sido creado en un laboratorio de Wuhan o que la mascarilla no servía para protegerse del virus chino, dejando claro que dicha agencia de verificación “no es neutral y no defiende a los ciudadanos de la mentira”.
“Ustedes en los últimos años se han dedicado a difamar a determinados medios de comunicación alternativos y a los periodistas y comunicadores que han cuestionado el discurso oficial del Gobierno, y también a los ciudadanos, tal y como se lo ordenan las grandes plataformas de redes sociales con las que ustedes han firmado contratos millonarios”, ha señalado.
En la misma línea, Mariscal ha denunciado que Maldita.es está utilizando su certificado de la red internacional de la verificación de datos para atacar los movimientos políticos que defienden la soberanía nacional y las fronteras, algo que no es de extrañar, dado que la red internacional de verificación de datos fue creada por el instituto Poynter, el cual es financiado por el globalista George Soros; Al mismo tiempo el diputado de VOX ha revelado que el equipo de dicha agencia de verificación se dedica en sus redes sociales personales a publicar ‘barbaridades’ contra VOX, PP y Ciudadanos.
Finalmente, Julio Utrilla ha tomado la palabra tras la comparecencia del doctor en derecho constitucional, Rafael Rubio, para defender la ‘información veraz’ en el periodismo, algo que no se da a día de hoy, dado que “los medios de comunicación están comprometidos con quien les paga”. El diputado por Valencia también ha puesto en valor las redes, las cuales “escapan al control político y por esos algunos partidos políticos y organizaciones las ven como una amenaza”.