El portavoz de VOX en la Comisión de Hacienda, Víctor González, ha respondido este martes a la ministra del ramo, María Jesús Montero, tras presentar ésta su partida de Presupuestos Generales del Estado: «Este es un debate presupuestario fantasmagórico sobre unos PGE de alucinación».
Así, el diputado de VOX ha recordado cómo la Comisión Europea destruía hace días las previsiones económicas del Gobierno y lamentaba que el rebote de la economía nacional perdiera intensidad y que España se quedara descolgada de la recuperación experimentada por sus socios europeos. «Nadie confía en sus predicciones, pero a ustedes les da igual. Se obstinan en mantener contra viento y marea su distopía», ha sentenciado.
González Coello de Portugal ha señalado que, si bien las circunstancias difíciles son reales -subida del precio de la energía, inflación… – esta realidad no tiene efectos tan negativos en otras economías europeas como lo tiene en España. «Con una estrategia de transición energética menos devota de la religión climática radical profesada por ustedes y más sensible a la realidad de España, el recibo de la luz hubiese subido menos», ha explicado el representante de VOX, que ha insistido en que discutir las cifras del Gobierno resulta «absurdo».
«Para qué decir algo sobre la nada, sobre la insoportable levedad de sus Presupuestos», se ha preguntado González, que ha recalcado, eso sí, cómo VOX vaticinó lo que iba a ocurrir: que el rebote de la economía iba a ser menor de lo previsto y que con la acción de Gobierno sería imposible una recuperación económica sana y sostenible.
«Se ha embarcado en una fuga hacia adelante que no terminará bien; el aumento del gasto estructural y en consecuencia, la escalada del déficit estructural, es insostenible», ha ratificado el representante de VOX, que ha lamentado también el mercado persa en que el Gobierno ha convertido estos Presupuestos Generales del Estado. «El verdadero peligro para los fondos de recuperación de Bruselas son ustedes», ha insistido el portavoz de VOX, que ha reclamado un plan de estabilización a largo plazo. «Estos PGE son los últimos, el canto del cisne de una política puesta al servicio de un modelo económico insostenible. El fracaso estrepitoso del único gobierno socialcomunista que queda en Occidente».