La portavoz de VOX en la comisión de Igualdad, Carina Mejías, ha intervenido durante la comparecencia de Gonzalo Boye para lamentar su presencia en el Congreso de los Diputados: “Traer a personas condenadas por delitos graves a una comisión a hablar y dar lecciones morales sobre delitos de odio no debe producirse”.
Mejías ha asegurado que permitir que esto suceda “supone atentar contra los principios fundamentales de esta Cámara, donde se viene a hablar de justicia, derechos y moral. Esto constituye un grave atentado contra las víctimas de los delitos cometidos por Gonzalo Boye”.
Boye, ha explicado la diputada de VOX por Barcelona, tiene un historial de condenas por sus conexiones con el crimen organizado, el terrorismo y el separatismo ilegal y “no tiene la más mínima autoridad moral para hablar de justicia o de ética profesional aquí porque también ha promovido discursos de odio y ha hecho de su carrera un campo de batalla para defender actitudes xenófobas”.
Finalmente, la presidenta socialista de la mesa, Susana Ros Martínez, ha cortado su intervención sin previo aviso pese a que ha sido muy generosa en los tiempos de otros grupos, como Esquerra y Junts, a los que se les ha permitido finalizar su intervención a pesar de haber sobrepasado el tiempo máximo en varios minutos.