El Grupo Parlamentario VOX ha registrado una proposición no de ley relativa a reducir la dependencia energética de España a través del impulso de las diferentes industrias energéticas existentes en nuestra nación para su discusión en la comisión de Industria y Turismo.
VOX defiende en el texto registrado que la acción del Gobierno de Sánchez en materia energética supone un grave peligro para la soberanía energética de España. Así, la formación asegura que el mix energético, entendido como la combinación de diferentes fuentes de energía primaria “está teniendo graves consecuencias, entre ellas el aumento de la dependencia energética”.
Esto conlleva, afirma el GP VOX, a que el suministro energético esté condicionado por la incertidumbre de las condiciones climáticas, las crisis externas o el contexto geopolítico internacional. Muestra de ello es el incremento del precio de la electricidad en un 57,93% tras el inicio de la guerra en Ucrania.
Sin embargo, el Gobierno mantiene en funcionamiento sus políticas ideológicas. De este modo, el Ejecutivo continúa con sus planes de prohibición de la explotación de los recursos naturales de España y el desmantelamiento de las centrales termoeléctricas defendido en la ley de Cambio Climático.
El GP VOX señala que estas políticas no hacen más que aumentar “la vulnerabilidad de España en un contexto internacional protagonizado por las tensiones geopolíticas y la subida del precio de la energía”.
Asimismo, VOX denuncia en su iniciativa la doble moral del Gobierno de Sánchez: mientras que se desmantelan las centrales nucleares y se prohíbe la explotación del carbón como fuente de energía, “España importó en el año 2023 un total de 6.441.680 MWh provenientes de Francia, donde el 66% de su producción proviene de la energía nuclear y el 5,8% del gas, y 399.854 MWh de Marruecos, donde la quema de carbón representa el 56,5% de su energía total y el gas supone el 11,5%”.
Todo esto en un panorama político internacional en el que el ecologismo radical y las imposiciones netamente ideológicas parecen haber retrocedido en pos de un sentido común ahora recuperado: “En la reciente Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2023 (“COP28”), más de veinte países se han comprometido a triplicar la capacidad de energía nuclear para 2050”.
También, señala VOX, la Unión Europea y algunos de sus países miembros, como Francia o Alemania, han entendido que la acelerada transformación verde no es un plan energético viable: “Mientras que el Parlamento Europeo aceptaba en junio de 2022 calificar la energía nuclear y el gas natural como ‘energías verdes’ para promover la explotación de estas dentro de los Estados miembros, el Ministerio de Transición Ecológica y el Reto Demográfico rechazaba la inclusión de estas energías dentro de la taxonomía verde europea”.
“Un cambio de paradigma europeo, acogido también por países de nuestro entorno, como Alemania, que ha frenado sus objetivos de descarbonización, revitalizando instalaciones eléctricas que se basan en la quema de carbón, o Francia, que ha marcado como objetivo construir media docena de reactores nucleares que deberán entrar en servicio entre 2037 y 2050”, añade VOX.
Por ello, el GP VOX recuerda que la adhesión del Gobierno de España a los planes del ecologismo radical no ha hecho más que “aumentar la dependencia energética del país”. Además, la formación propone emplear los fondos de la UE, de 210.000 millones de euros en ayudas para buscar alternativas energéticas, recientemente aprobados para revertir los procesos de desmantelamiento de las centrales termoeléctricas contribuyendo así a la creación de “un proceso para abordar la crisis demográfica que afecta a nuestra nación, especialmente a la España rural”.
Finalmente, VOX denuncia que “es necesario que el Gobierno revierta urgentemente el modelo energético actual, promoviendo políticas orientadas a una transición hacia fuentes de energía menos contaminantes sin poner en peligro el empleo y la economía de las familias españolas y nuestra competitividad”.
Por todo ello, se insta al Congreso a que exija al Gobierno a:
- Promover la derogación de la Ley 7/2021, de 20 de mayo, de cambio climático y transición energética.
- Derogar el Pacto Verde Europeo y revertir todas las políticas en orden al desarrollo de un mix energético que garantice la seguridad y la estabilidad del suministro eléctrico, así como precios asequibles para los españoles.
- Impulsar el desarrollo de las infraestructuras e instalaciones necesarias de todas las fuentes de energía posibles para la consecución de la soberanía energética en España.
- Reconocer la energía nuclear y el gas como energías limpias y sostenibles.
- Impulsar en el seno de la Unión Europea la adaptación de las imposiciones en materia de emisiones de CO2 a las necesidades de España y su industria al objeto de conseguir una transición hacia fuentes de energía menos contaminantes que protejan el empleo y la riqueza.
- Poner en marcha todos los mecanismos necesarios para detener el desmantelamiento de centrales térmicas, así como proceder a la reconexión de las que se hayan cerrado.