El GP VOX ha registrado una Proposición no de ley de mejora y estímulo de la Industria de Defensa ante el actual y complejo panorama geopolítico. Por ello, VOX entiende imperativo que el Gobierno apoye a la industria nacional, no solamente por su importancia estratégica, sino por la capacidad de generación de empleo, innovación, progreso y riqueza entre los españoles.
El cambio de paradigma en el escenario internacional (especialmente por la guerra de Ucrania) ha provocado que la industria de Defensa se enfrente a un nuevo panorama que, como apunta el director general de Armamento y Material, el almirante Aniceto Rosique, está marcado por lo siguiente:
- El desarrollo impulsado por las tecnologías digitales ha derivado en una carrera tecnológica global y en una creciente utilización del ciberespacio y espacio ultraterrestre. Todo ello demandará nuevas capacidades militares.
- Los efectos de la pandemia COVID-19 han puesto de manifiesto las dependencias del mercado exterior y vulnerabilidades de nuestra industria con la deslocalización de la producción y la crisis de la cadena de suministros.
- La invasión de Ucrania, que está llevando a los países de la OTAN y la UE a reconsiderar su compromiso en el gasto de Defensa y, paralelamente, está produciendo un cambio de percepción en la sociedad sobre la necesidad de impulsar la industria europea con una verdadera autonomía estratégica.
Asimismo, hay que recordar que la Constitución Española hace una referencia explícita a la Defensa Nacional en su artículo 8:
- Las Fuerzas Armadas, constituidas por el Ejército de Tierra, la Armada y el Ejército del Aire, tienen como misión garantizar la soberanía e independencia de España, defender su integridad territorial y el ordenamiento constitucional.
- Una ley orgánica regulará las bases de la organización militar conforme a los principios de la presente Constitución.
De esta manera, el cumplimiento de los “altos afines” atribuidos ex lege a las Fuerzas Armadas exige la existencia de una industria nacional de Defensa eficiente y competitiva capaz de proveer a las Fuerzas Armadas de bienes y servicios de tal manera que se garanticen los principios de libertad de acción, ventaja operativa y seguridad del suministro. Principios, todos ellos, vinculados con el concepto de soberanía. Por ello, el pleno ejercicio de la soberanía nacional exige la producción autónoma de bienes y servicios a ser utilizados en caso de conflicto.
Por este motivo la Defensa tiene la consideración de bien público que garantiza la soberanía nacional, la libertad, la vida y otros derechos esenciales de los ciudadanos y, por tanto, su prestación es una responsabilidad irrenunciable e indelegable del Estado. Además se estima que la industria de Defensa genera más de 25.000 puestos de trabajo y supone un volumen de facturación del 7% del PIB industrial.
Por todo ello, el GP VOX pide al Congreso que inste al Gobierno a:
- Impulsar un mecanismo de estabilidad presupuestaria de Defensa que permita dotar de una autonomía estratégica real a las Fuerzas Armadas.
- Elaborar un Plan de potenciación de la investigación tecnológica militar articulado en torno a las metas tecnológicas ligadas a las capacidades industriales estratégicas y a las necesidades de nuestra Defensa.
- Fomentar la competitividad de las empresas integrantes de la industria de Defensa nacional, haciendo que disminuya su dependencia de los presupuestos del Estado.
- Dar a conocer, mediante las pertinentes, actuaciones comunicativas y divulgativas, la importancia de la industria de Defensa como generadora de empleo cualificado, innovación, progreso y riqueza entre los españoles.