El portavoz de VOX en la Comisión de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Rodrigo Jiménez, ha votado en contra del nombramiento de la candidata propuesta por el Gobierno para consejera de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, María Jesús Martín.
«Este grupo y este portavoz no dudan de su honorabilidad y honradez, pero sí dudamos de la honorabilidad en el proceso que la ha llevado a su nombramiento como Consejera de la CNMC con la salida del marido de la Vicepresidenta Teresa Ribera, el señor Mariano Bacigalupo y el posterior nombramiento de este como Consejero de la CNMV», ha explicado Jiménez.
El diputado de VOX ha señalado que Mariano Bacigalupo «ha estado tomando decisiones en un organismo oficialmente independiente sobre normativa firmada por la esposa y representando además a la CNMC en Organismos reguladores internacionales». A continuación Rodrigo Jiménez ha asegurado que «a esto se llama conflicto de intereses».
En este sentido, el portavoz de VOX ha afirmado que Bacigalupo «desembarca en la CNMV curiosamente llegando justo en el momento que tiene que participar en la delicada decisión de la CNMV sobre si el Gobierno se saltó la Ley en su asalto a INDRA. Es más, sobre este asunto, la CNMV tiene que decir si el Gobierno de la mano de Prisa ha asaltado de forma legal o no el Consejo de Indra, pasándose por la roca todos los consejeros independientes llegando a controlar el 40 % de Indra sin hacer una OPA».
Asimismo, Jiménez ha señalado que ante este panorama, «la estética es fundamental, y si no hubiera una larga y vergonzosa tradición de nepotismo y enchufismo en España, la sociedad en general y los grupos parlamentarios que apostamos por una verdadera independencia, no sólo del poder legislativo y judicial, sino también de los organismos reguladores tendríamos una visión diferente, pero entienda que es normal que reaccionemos mal ante estos nombramientos”.
Por último, Rodrigo Jiménez ha recordado que VOX presentó una proposición de ley en mayo de 2020 precisamente «para acabar con el enchufismo y el nombramiento de directores generales a dedo, teniendo que ser funcionarios sin excepciones”.