El Grupo Parlamentario VOX ha registrado una Proposición No de Ley relativa a las medidas para defender el uso del dinero en efectivo en el marco del coronavirus.
VOX pretende eliminar de los protocolos y recomendaciones sanitarias frente al coronavirus cualquier desincentivo al uso de efectivo, después de las consecuencias negativas derivadas del anuncio del Gobierno en el que desaconsejaba el uso del dinero en efectivo para prevenir el contagio del virus.
Las recomendaciones del Gobierno han supuesto en la práctica una fuerte disminución en el uso del efectivo con diversas consecuencias negativas, que la Asociación Profesional de Compañías Privadas de Servicios ha manifestado y que reproducimos a continuación:
- Exposición a la población en riesgo:
-El efectivo es el medio de pago más sencillo para personas en riesgo de exclusión social. Para determinados colectivos, los medios de pago alternativos son demasiado difíciles de usar, especialmente para aquellos colectivos vulnerables. Según el Instituto de Coordenadas, la población española sin acceso a oficinas bancarias es superior al 2%. Con el ritmo de cierre de sucursales bancarias se estima que en 2025 aproximadamente el 5% de los españoles tendrá muchas dificultades para acceder al dinero en efectivo y cerca de tres millones estarán en grave riesgo de exclusión financiera, un riesgo con notables consecuencias sociales y económicas.
-El efectivo es el medio de pago más práctico para los menores de edad y los ancianos. En España un menor de edad no puede abrir una cuenta bancaria por sí mismo. En el caso de los mayores según Aproser, el 83% de los encuestados cree que la reducción o supresión del efectivo implicaría dificultades para las personas de edad avanzada y menores de edad.
–El efectivo es el único medio de pago para la población adulta no bancarizada. Según el Banco Mundial sólo el 50% de la población mundial de 15 años o más tiene abierta una cuenta bancaria en alguna institución financiera.
–El efectivo permite un mejor control de las finanzas personales. El dinero físico facilita que cualquier persona pueda controlar de manera sencilla y en cualquier momento los gastos que realiza, evitando el sobreendeudamiento y permitiendo ajustar el presupuesto familiar y personal de manera más realista.
- b) El efectivo es necesario para el correcto funcionamiento de la economía:
-El coste del metálico es inferior que el de otros medios de pago. Los costes soportados por los bancos, la industria minorista y los consumidores son menores cuando el pago se hace en metálico. Un estudio de la International Security Ligue concluye que para una transacción comercial media de 59 dólares (53 euros) el efectivo cuesta 0,54 dólares por transacción, mientras que las tarjetas de débito suponen unos gastos del triple, exactamente 1,52 dólares por transacción.
-Un medio de pago que no discrimina a las pequeñas empresas ni a los emprendedores. Para poder aceptar medios de pago electrónicos, los comerciantes deben asumir diferentes costes relacionados con la infraestructura tecnológica (por ejemplo, un TPV). Para los grandes comerciantes estos costes se deprecian fácilmente por el alto volumen de transacciones que realizan. Sin embargo, en el caso de los pequeños, resulta más complicado. El efectivo, en cambio, no requiere ninguna inversión previa.
-En España el 70-80% del consumo privado aún se paga en metálico y uno de cada cuatro españoles aún paga “exclusivamente en efectivo” todos sus gastos semanales.
Otra de las ventajas del pago en metálico es que protege la privacidad sobre hábitos de consumo.
Asimismo, no hay ninguna evidencia científica para que el Gobierno haya desaconsejado el uso de efectivo. La OMS no ha dicho en ningún momento que los billetes transmitan coronavirus. Incluso Stephanie Brickman, de la OMS, ha afirmado que “el virus no sobrevivirá por mucho tiempo en superficies, particularmente en una superficie seca como un billete de banco”.
Por todo ello, el GPVOX pide al Congreso que inste al Gobierno para defender el uso del dinero en efectivo en el marco de la epidemia del coronavirus:
- Eliminar de los protocolos y recomendaciones sanitarias frente al coronavirus cualquier desincentivo al uso de efectivo.
- Publicar y divulgar dichos protocolos en los medios que sea necesario para reparar el daño económico y la desinformación causados por la errónea indicación gubernamental.