Huesca – VOX Huesca apuesta por la cultura, y para ello proponen la instalación de casetas para intercambio de libros en parques y lugares públicos de la ciudad, las cuales ofrecen una serie de beneficios y motivos que contribuyen al enriquecimiento cultural, social y educativo de la comunidad.
Desde VOX defienden que estas estructuras ofrecen un acceso fácil y gratuito a una amplia variedad de libros para personas de todas las edades y trasfondos socioeconómicos, fomentando así el hábito de la lectura y promoviendo la alfabetización en nuestra comunidad.
Una de las mayores ventajas de estas casetas es su capacidad para promover la cultura y el conocimiento. Al ofrecer una amplia selección de libros en diferentes géneros y temas, permiten a los ciudadanos explorar nuevos intereses, ampliar sus horizontes y enriquecer su comprensión del mundo que les rodea. Desde novelas clásicas hasta libros de ciencia ficción, estas casetas tienen algo para todos los gustos y preferencias literarias.
Además de fomentar la lectura, las casetas de intercambio de libros promueven la reutilización y el reciclaje de libros usados. En lugar de desechar libros que ya no se necesitan, se les da la oportunidad de ser disfrutados por otros lectores, reduciendo así el desperdicio.
Es de resaltar, que las casetas de intercambio de libros son accesibles para personas de todas las edades y habilidades, lo que garantiza que la lectura sea una actividad inclusiva y accesible para todos. Ubicadas en lugares públicos como parques y plazas, están al alcance de todos, incluidos aquellos que pueden enfrentar barreras económicas para acceder a libros nuevos.
Por último, estas casetas embellecen el espacio público y agregan valor estético y cultural a nuestra ciudad. Diseñadas de maneras creativas y decoradas con arte local, se convierten en puntos de referencia visuales en el paisaje urbano, convirtiendo nuestros parques y plazas en destinos más atractivos y vibrantes para la comunidad.
La propuesta también incluye una dotación inicial de libros para dichas estructuras, y la instalación de mapas por la ciudad que permitan la correcta ubicación de las diferentes casetas de intercambio. Posteriormente y una vez en funcionamiento, pueden utilizarse los expurgos de las bibliotecas públicas y de los centros educativos de la capital para la dotación periódica de libros en estas casetas, además de la propia dotación inicial a cargo del Ayuntamiento.
En resumen, en VOX creen que las casetas de intercambio de libros son mucho más que simples estructuras. Son centros de cultura y conocimiento que enriquecen la vida de nuestra comunidad, promoviendo la lectura, la inclusión y la creación de comunidad mientras embellecen nuestro entorno urbano. Con su capacidad para inspirar la imaginación, estimular el pensamiento crítico y fortalecer los lazos comunitarios, estas casetas puede ser un tesoro para nuestra ciudad.20
