Recientemente la Consejería de Medioambiente animaba a los melillenses a sumarse al coche eléctrico y aprovechar las ayudas que concede la Ciudad, anunciando que el próximo año habrá una zona de emisión cero en la que se impedirá el acceso de los vehículos de combustión, pero “este cambio de movilidad sigue sin tener demasiado arraigo entre los melillenses”, asegura VOX Melilla.
En los tres primeros meses del año se han matriculado en Melilla sólo nueve vehículos eléctricos contando con siete puntos de recarga de acceso público ubicados en el Centro Comercial Murias Parque, Mercadona, Carrefour, Kia Parres, mercado Central, el parking Plaza de las Culturas y el del Aeropuerto. “A pesar de que existen ayuda para fomentar el parque automovilístico, la escasa red de carga y el elevado coste de estos frenan la adquisición de vehículos”, asegura VOX Melilla.
Por otro lado, dependiendo del tipo de recarga ya sea convencional, semi-rápida o rápida, la vida útil de la batería se puede ver afectada principalmente en el último caso. Además, del inconveniente que plantea la autonomía del automóvil que, con la batería al máximo de su capacidad, limita su recorrido entre los 300 y 500 kilómetros en función de si circulamos a velocidades altas en autopista o en ciudad dado que su autonomía es mayor al tener frenada regenerativa.
Pero “el principal problema es la prisa que se ha dado este Gobierno socialcomunista en dejar de explorar y explotar nuestros numerosos recursos naturales que nos hace dependientes y a qué precio del extranjero”, recalca la formación local para añadir: “Una sinrazón que prohíbe explotar centrales nucleares, extraer gas y petróleo propios para adquirirlos fuera de España”.
“Nos inquieta especialmente la pretensión del Gobierno de cerrar cuatro de los siete reactores nucleares españoles para 2030”, subraya el partido local. Desde VOX “estamos en contra de esta Ley de Cambio Climático y Transición Energética que rechaza las fuentes energéticas que tenemos en nuestro país, y a favor de las energías renovables, que nos acercarán a la soberanía energética.”, asevera. España tiene “ventaja” en este ámbito por sus muchas horas de sol y por las empresas nacionales que están entre las más punteras del mundo, a pesar de que las energías fotovoltaica y eólica tienen el inconveniente de su intermitencia y difícil almacenamiento.
Desde VOX Melilla “apostamos por incluir las energías renovables en un mix equilibrado que garantice energía a un precio competitivo y estabilidad en la producción”, además de “conservar nuestra industria nuclear, que está libre de CO2 y que sería complementaria a las renovables”. De esta forma se daría “robustez” al sistema y se podría aprovechar las cuencas hidrográficas mediante trasvases y el agua de los pantanos para los regadíos.
