El candidato de VOX a la Presidencia de Extremadura, Ángel Pelayo, se trasladó el pasado fin de semana a la Feria del Queso que se celebraba en Trujillo, desde donde celebró la «riqueza que este evento de orden internacional aporta a la ciudad y a toda la región».
Desde allí, Pelayo destacó, además, el atractivo turístico que supone este evento, que «llena las calles de la ciudad para disfrutar de la gastronomía de Extremadura». Pero, además, defendió el aspecto social de la Feria porque se basa en el pequeño comercio «que es el que logra fijar la población en la región».
En este punto, denunció que, precisamente, la falta de población es uno de los problemas de la región. Además, la industria del queso en Extremadura se basa en pequeñas queserías familiares. Y «corre el riesgo de perderse este pequeño comercio porque los altos costes y las trabas burocráticas hacen que estos pequeños negocios no estén pasando de generación en generación.
Es por esa razón que, desde la Feria del Queso de Trujillo, se comprometió a trabajar en la Junta de Extremadura para que, tanto este evento, como la industria del queso, «tenga en el futuro el auge que merece».
