Ante las cifras sobre la actividad durante el año 2023 de los cuatro aeropuertos de Castilla y León tanto en número de pasajeros como de operaciones, vemos como nuestros aeropuertos precisan de un conjunto de acciones que los impulsen de forma decidida, ya que estas cifras revelan que Castilla y León aún se encuentra muy alejada de los números que presentan otras comunidades, también si hablamos en términos de inversión por parte de AENA en otras regiones, ya que deja de lado a Castilla y León en su Plan Estratégico 2022-2026.
Hoy en día el sector aeronáutico es clave para el desarrollo de la economía no sólo por la trascendencia que tiene el sector del turismo, sino también porque es una palanca imprescindible para el propio desarrollo industrial y la logística que necesitan las empresas.
Estos aspectos deben llevar a desarrollar estrategias que permitan optimizar nuestros aeropuertos aprovechando las sinergias derivadas de las infraestructuras viarias y de ferrocarriles, así como el impulso que puede generar el futuro Corredor Atlántico como eje de transportes que una Castilla y León con los puertos portugueses y el resto de Europa por carretera y a través del ferrocarril.
En Castilla y León existe una red viaria que nos conecta con Madrid, el Norte, Levante y Portugal, así como centros logísticos, polígonos industriales y grandes empresas que, con medios adecuados, pueden aprovecharse de unas infraestructuras aeroportuarias que impulsasen la actividad económica.
El plan estratégico de AENA prevé inversiones entre los años 2022-2026 para España por importe de 2.916 millones de € con un promedio anual de 586 millones de €.
Para nuestro Grupo Parlamentario, los aeropuertos de Castilla y León no pueden quedar fuera de las inversiones que AENA proyecta por lo que se debe ser proactivo en la búsqueda de soluciones que impulsen la actividad aeroportuaria y servir así al desarrollo económico de la Comunidad.
Tal y como refleja AENA, “el perímetro del aeropuerto se amplía, lentamente, al desarrollo de actividades que exceden del negocio aeronáutico tradicional” por ello, nos encontramos ante una situación que exige estar en la primera línea de las oportunidades que esa nueva tipología de negocio trae consigo.
Con las infraestructuras necesarias, tanto a nivel de pistas de aterrizaje como de nuevos almacenes o hangares, el aumento del flujo de mercancías que se prevé por la región se vería incrementado de manera exponencial por el negocio que generaría una mayor capacidad de tráfico aéreo.
Conexiones como pudieran ser en Valladolid la confluencia de la A-6, el aeropuerto de Villanubla y la red ferroviaria de alta velocidad, Burgos con su desarrollo industrial y conexiones viarias con Europa y el País Vasco, León con su conexión con Galicia y el norte de España y Salamanca y su situación privilegiada con Portugal, deberían servir para atraer a Castilla y León millones de euros en inversión dada la alta conectividad que ofrecerían para el transporte de componentes, piezas y demás elementos industriales, generando un ecosistema industrial, empresarial y económico que fortalecería la salud de la economía en Castilla y León.
Esto nos lleva a considerar que deban tomarse medidas que nos permitan situar a nuestros aeropuertos como lugares de referencia a los que llegar o desde los que partir para todo aquello que puedan necesitar o producir las empresas.
Por todo ello, el Grupo Parlamentario VOX en las Cortes de Castilla y León ha registrado una iniciativa parlamentaria en forma de Proposición no de Ley para ser debatida en Pleno que pretende potenciar y mejorar los niveles de actividad de nuestros aeropuertos regionales para que sirvan de motor de empuje a nuestra economía. La tarea no es sencilla, pero podemos tomar como ejemplo el aeropuerto de Zaragoza, cuya gestión le ha permitido ser el segundo aeropuerto de mayor tráfico de mercancías de España con continuas inversiones que, además, le están potenciando como aeropuerto de pasajeros llegando a casi triplicar las cifras del conjunto de aeropuertos de Castilla y León.
Desde este Grupo Parlamentario también vemos necesario incrementar la competitividad de nuestros aeropuertos realizando una rebaja de las tasas de aterrizaje con el fin de atraer nuevos operadores.
Esto último, junto a planes específicos e individualizados para cada uno de los cuatro aeropuertos de la región que avanzaran en la mejora de infraestructuras con nuevos hangares preparados para carga con conexiones especificas hacia las autovías, llevaría a que Castilla y León tuviera más facilidades para el tráfico aéreo, con todos los beneficios que ello supondría tanto para el turismo como para la industria.
El objetivo de estas medidas no es otro que el crecimiento de la economía de Castilla y León, por lo que las provincias que no se viesen beneficiadas de manera directa al no contar con un aeropuerto, puedan aprovechar ese crecimiento de la economía con paquetes turísticos y planes industriales desarrollados ad hoc.
La Proposición No de Ley registrada recoge cuatro Propuestas de Resolución:
1.- Instar a la Junta De Castilla y León para que a su vez inste al Gobierno de España a que desarrolle un programa de inversiones en un plan de infraestructuras necesarias que tengan como objeto la adecuación de los aeropuertos de Castilla y León como polos de recepción de mercancías, así como la modernización de los aeropuertos de Burgos, León, Salamanca y Valladolid con el fin de hacerles competitivos ante los nuevos retos que afronta la aviación comercial en el tráfico de pasajeros y mercancías.
2.- Instar a la Junta de Castilla y León para que a su vez inste al Gobierno de España, a que AENA incluya a los aeropuertos de la Comunidad dentro de las inversiones que su plan estratégico 2022-2026 contempla para España.
3.- Instar a la Junta de Castilla y León, para que a su vez inste al Gobierno de España a que AENA aplique un descuento del 20% en todas las tasas aeroportuarias de los aeropuertos de Burgos, León, Salamanca y Valladolid.
4.- Instar a la Junta de Castilla y León para que inste al Gobierno de España a establecer una cooperación efectiva entre ambos gobiernos con el fin de fijar un calendario de colaboración para determinar conjuntamente las mejores estrategias diferenciadas para el desarrollo y potenciación de los aeropuertos situados en Castilla y León con el fin de desarrollar las sinergias que aportan sus ubicaciones.