Abascal: «Nos atrevemos a abrir el debate sobre el futuro de Europa, porque amamos a Europa y queremos que Europa sobreviva»

LA FUNDACIÓN DISENSO PRESENTA EL DOCUMENTAL 'EL FUTURO DE EUROPA'
  • «Ese eje franco alemán que hasta ahora lo dictaba todo es parte del pasado y ya está siendo sustituido en muchísimas naciones -Italia, Polonia, Finlandia, Suecia, Hungría, Chequia- por otras fuerzas alternativas con las que nosotros nos identificamos». «Muy pronto ocurrirá en Francia y en España. Y cuando esas fuerzas que defienden las naciones soberanas europeas sean las fuerzas principales en las respectivas naciones, Europa podrá salvarse».

El presidente de VOX, Santiago Abascal, ha presentado este lunes el documental de la Fundación Disenso ‘El futuro de Europa’ en un acto celebrado en el Hostal de Los Reyes Católicos, en la emblemática Plaza del Obradoiro de Santiago de Compostela, ciudad a la que se ha referido como el «corazón espiritual de Europa».

Allí, Abascal ha reconocido su orgullo por estar «otra vez en Galicia» -una tierra de la que es «hijo»- y el honor que siente por contribuir a «abrir un debate importantísimo que aún no se ha producido en España, con la intensidad y con la magnitud que el debate merece, y que no es otro que el futuro de Europa».  Así, y poniendo en valor el trabajo de Disenso por «romper o abrir todos esos debates que no se habían producido,  romper los consensos o las mordazas que habían impuesto a la población española», ha calificado de «caduco» al eje franco alemán que muy pronto será sustituido, a su juicio, por nuevas fuerzas.

«Habían decretado todos los debates cerrados; no se podía hablar de inmigración porque inmediatamente tenían un epíteto destinado al que osase abrir un debate sobre las inconveniencias de la inmigración masiva. No se podía hablar del debate del género, porque ya habían dictado que el número de géneros era interminable y que no se podía hablar de hombre y de mujer. No se podía hablar de la voracidad fiscal, porque los impuestos estaban destinados a los servicios públicos, aunque una gran parte de la población viera que el fruto de su esfuerzo acababa en la financiación del gasto político y del gasto ideológico. No se puede hablar del clima ni, por supuesto, de lo más importante de las consecuencias sociales para las clases medias y más desfavorecidas, de las restricciones climáticas y de la tan mencionada transición energética», ha enumerado el presidente de VOX a modo de ejemplo de esos debates cerrados que VOX, a través de Disenso, ha vuelto a abrir.

Y, en relación a Europa, ha recordado Abascal que «el debate sobre el ser de Europa, sobre el futuro de Europa estaba cancelado en España hasta que ha llegado Vox». «Los candidatos [a las elecciones europeas] salían unos y otros definiéndose europeístas y diciendo que los demás eran ante europeístas, sin atreverse a profundizar lo más mínimo». Por eso, y hasta el próximo año que lleguen las próximas elecciones europeas, VOX abrirá ese debate sobre el Viejo Continente:

«Durante estos años hemos reflexionado muy poco sobre cuáles han sido las consecuencias positivas y negativas de la entrada en la Unión Europea. Solo atreverse a plantear una objeción implicaba que a uno se le retirase el carné de europeísta», ha lamentado Abascal que ha expresado, «con toda claridad y para que nadie se lleve a engaño» que para VOX «España es Europa sin matices. España es Europa por derecho propio a otros, a otras naciones europeas». «Formar parte del conjunto de Europa a otros les ha venido dado por la geografía. A nosotros nos ha hecho falta una historia de siglos de reconquista para defender una identidad concreta y para que hoy España pueda ser por derecho propio, parte de Europa».  «España -ha añadido Abascal- ha contribuido a salvar a Europa en batallas importantísimas».

Por eso, cuando VOX pone alguna objeción sobre las decisiones de la Unión Europea, no lo hace, ha explicado el de VOX, desde ningún tipo de eurofobia. «Al contrario. Pensamos que quien hoy pone en cuestión Europa, su identidad, su historia y sus libertades son los burócratas de la Unión Europea. Nosotros defendemos una Europa fiel a sus raíces, que son muy concretas, con todos los matices que se quieran: el pensamiento griego, el derecho romano y la teología cristiana». «Defendemos una Europa original de naciones soberanas y no aceptamos de ninguna manera que, con el pretexto de una mayor coordinación, se acabe con las naciones soberanas y se acabe, por lo tanto, con nuestra democracia, alejando todas las decisiones de los ciudadanos y haciendo que los poderes soberanos sufran y sean sustituidos por una presión federal absolutamente inaceptable desde un punto de vista democrático, soberano e histórico».

Intentos totalitarios

Y es que, ha recordado Abascal, hubo «intentos totalitarios en Europa» de hacer una Europa en la que todo se decidiese desde un centro: «bien la Europa de Hitler, o bien esa Europa en parte soviética, donde se pretendía decir a las naciones qué es lo que tenían que hacer». «Nosotros defendemos una Europa de naciones libres y soberanas que sea fiel al tratado fundacional y una Europa viable en la que el campo, la ganadería, la agricultura sean viables y no estén subvencionados o tengan que acabar siendo clausurados para convertir Europa en una especie de parque temático». Una Europa, en fin, que «no se pegue tiros en el pie y que apueste por la soberanía energética, apostando por la exploración y la explotación de todos nuestros recursos naturales y energéticos».

En este sentido, Abascal ha recordado cómo la dependencia energética de Alemania y Francia ha hecho que «ante el inicio de una guerra de invasión en Ucrania» muchas naciones se hayan visto debilitadas ante Rusia.

¿Antieuropeos? 

Abascal se ha preguntado en este sentido quiénes son los antieuropeos: «si los que queremos potenciar el mercado único o los que están abriendo puertas al producto extranjero que arruina nuestros ganaderos y a nuestros agricultores; los que están financiando a países extracomunitarios que compiten de manera desleal con los productos españoles y europeos. ¿Quiénes son antieuropeos? ¿Los que sabemos que están sirviendo a los intereses de terceras naciones o los que estamos con nuestros pueblos? ¿Los que nos negamos a que se pierda toda diversidad y toda la riqueza cultural de Europa o los que quieren hacer tabla rasa, haciendo que no existan diferencias culturales y que todo sea sustituido por una especie de magma multicultural consecuencia de la inmigración masiva?».

A estas preguntas VOX responde con claridad, como ha descrito Santiago Abascal: «Nos atrevemos a abrir el debate sobre el futuro de Europa, porque nosotros amamos a Europa y queremos que Europa sobreviva». «Ese eje franco alemán que hasta ahora lo dictaba todo es parte del pasado y ya está siendo sustituido en muchísimas naciones -Italia, Polonia, Finlandia, Suecia, Hungría, Chequia- por otras fuerzas alternativas con las que nosotros nos identificamos». «Probablemente -ha concluido Abascal- muy pronto ocurra eso también en Francia y en España. Y no tengo ninguna duda de que cuando esas fuerzas que defienden las naciones soberanas europeas sean las fuerzas principales en las respectivas naciones, Europa podrá salvarse».