Amaia Martínez muestra su apoyo a Guardia Civil y Policía Nacional en Vitoria

Presente en los actos en recuerdo de los dos agentes asesinados en Barbate, defiende un mayor protagonismo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en el País Vasco.

Miguel Ángel González y David Pérez, los dos agentes de la Guardia Civil asesinados en Barbate, han sido protagonistas ausentes de la la concentración convocada en Vitoria por la Plataforma por una jubilación digna y la equiparación salarial de las FCSE, en la que ha participado Amaia Martínez, parlamentaria vasca de VOX.

Antes de iniciarse el acto Martínez ha transmitido su más sentido pésame a los reunidos ante la  delegación del Gobierno de España en la capital alavesa “por la muerte evitable de dos agentes a los que el Ministerio de Interior ni dotó ni protegió como debía, en un acto de profunda irresponsabilidad que debería llevar al ministro Marlaska a la dimisión, del que es culpable el propio presidente Sánchez”.

La parlamentaria vasca de VOX ha querido mostrar su absoluto apoyo a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en el País Vasco, ha reivindicado un creciente protagonismo de la Guardia Civil y de la Policía Nacional en esta región para acabar con una creciente sensación de inseguridad ciudadana y ha denunciado el abandono en el que viven miles de agentes, “del que es responsable el Gobierno de España y que se ha saldado con la muerte evitable de dos agentes indefensos ante las mafias del narcotráfico”.

Acerca de la reclamación de “una justa equiparación salarial con otros cuerpos policiales, como la Ertzaintza”, Amaia Martínez ha recalcado que VOX la ha defendido tanto en el Parlamento Vasco como en el Congreso de los Diputados “convencidos como estamos de que el creciente reconocimiento que reciben en la calle los agentes de la Guardia Civil y de la Policía Nacional, debe también tener su reflejo en el ámbito económico, salarial”.

La parlamentaria vasca de VOX ha querido recordar el papel fundamental de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en la derrota del terrorismo, “un papel protagonista que ha pagado con cientos de vidas, las de agentes y mandos que se pusieron a disposición de una sociedad que en demasiadas ocasiones les ha pagado con el olvido, mirando hacia otro lado”.