Sin ningún rubor, afirman desde VOX, el tripartito antepone los intereses partidistas a los generales. No parece de recibo que los Presupuesto Municipales puedan posponerse hasta principios del verano solo por limar las diferencias internas en la ya denominada “Crisis del Acuerdo de Fadrell”.
Para VOX, la falta de claridad en las prioridades supone una dejación de funciones que tendrá colapsado económicamente el Ayuntamiento solo para solventar “peleas” internas derivadas de una votación en pleno sobre la Asamblea de Fiestas.
Para Luciano Ferrer, portavoz de VOX, “los castellonenses no se merecen un Ayuntamiento sin Presupuestos, un Ayuntamiento sin margen de maniobra, solo por rencillas internas de un tripartito que parece priorizar sus intereses sobre los de los ciudadanos olvidando el servicio público al que se deben”
Ferrer quiso también añadir que ”puede parecer que tengan miedo a presentar unos presupuestos ‘rodillo’, sin nada consensuado, y que la oposición pueda rechazarlos, unos Presupuestos donde se anteponen las ideologías a las necesidades reales del municipio”
“Un presupuesto es el fiel reflejo del proyecto de ciudad que tiene un equipo de gobierno, luego, al parecer, no tienen proyecto”, concluyó Luciano Ferrer.
