El grupo municipal VOX solicita al alcalde de Badajoz que retire la simbología LGTBI de la fachada del Ayuntamiento

El grupo municipal VOX en Badajoz ha presentado, esta misma mañana en el ayuntamiento, una solicitud dirigida al alcalde, Ignacio Gragera, donde le requiere la retirada inmediata de la iluminación con los colores que simbolizan al colectivo LGTBI de la fachada del consistorio. En dicho escrito, los concejales de VOX comentan que estos símbolos carecen de reconocimiento legal válido en ninguna administración territorial y, por tanto, sólo pueden ser calificados de parciales y electoralistas, por lo que no representan a la mayoría de los ciudadanos, ni siquiera a todas las personas homosexuales, ya que muchas de ellas rechazan ser colectivizadas y utilizadas como arma política.

Este uso de la simbología del lobby LGTBI no aporta nada al bienestar general de los ciudadanos, puesto que estas asociaciones, que reciben millones de euros de dinero público anualmente, nada tienen que ver con los derechos de los homosexuales, sino con una serie de grupos de presión que buscan ganar poder y recibir subvenciones a costa del enfrentamiento social. En todos los partidos políticos hay gente de distintas tendencias sexuales, homosexuales o heterosexuales, pero la condición sexual no debería tener ninguna relación con la toma de decisiones políticas. De hecho, VOX se posiciona desde sus orígenes en la línea constitucional que afirma en su Artículo 14 que “los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social”.

El rechazo de VOX a estas asociaciones se ve incrementado por el adoctrinamiento que llevan a cabo en las aulas de colegios e institutos de toda España, donde comparten una visión de la sexualidad no apta para los menores y sin el consentimiento de los padres o tutores.

El ayuntamiento es un espacio público, representante del Estado español en cada localidad, por lo que sólo los símbolos y las banderas institucionales deben ser expuestos, empezando por la enseña nacional, que es la que mejor representa al pueblo español, su unidad y pluralidad.