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El Grupo Parlamentario registró un escrito en la Cámara para declarar nulo el acto de votación en el que se eligió a tres miembros de la Comisión de la Memoria, pero la Mesa del Parlamento no se ha pronunciado.
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VOX considera que el PSOE ha hecho un ridículo institucional en toda regla con esta votación de miembros a la Comisión de la Memoria.
VOX ha exigido al Parlamento de Cantabria que declare nulo el acto de votación celebrado en sesión plenaria del día 19 de diciembre en el que se eligió por la Cámara a tres miembros de la Comisión de la Memoria y celebre una nueva propuesta de candidatos asegurándose la previa aceptación por parte de estos a su candidatura, por tratarse de un derecho de sufragio pasivo y, como tal, de carácter personalísimo.
Así reza en un escrito presentado por el portavoz parlamentario de VOX, Cristóbal Palacio, registrado el pasado 22 de diciembre en la Cámara tras la renuncia de D. Enrique Menéndez Criado, una las personas cuyo nombre fue propuesto para formar parte de la “Comisión de la Memoria” y que, al día siguiente de ser elegido, renunció “porque nadie había contactado con él para ser propuesto”.
Según Palacio, estamos ante el caso de una persona que, a pesar de ser propuesta, “no puede ser elegida porque no desea ser sujeto pasivo del acto electivo”. Esa votación, afirma VOX, “adolece del vicio de nulidad al no contar con la previa declaración de voluntad de los sujetos pasivos del acto electoral que, en ningún caso, puede ser supuesto”.
“Para considerar válidamente nombrado al candidato, además de contar con su confirmad para pactarse a la elección, debiera contar con su aceptación del cargo. En este caso no ha ocurrido ni una cosa ni otra; con lo que no se puede hablar de renuncia, como pretende Zuloaga, sino de inexistencia de nombramiento”, ha explicado Cristóbal Palacio.
El portavoz de VOX denuncia que, “a fecha de hoy”, la Mesa del Parlamento “no ha considerado el escrito” lo que significa que “no les importa la legalidad”.
Para VOX, el PSOE utiliza el Parlamento “de forma sectaria y partidista” para imponer su “relato de revancha y venganza” sin importar el daño que hacen a la imagen de dicha institución. “Es un ridículo institucional en toda regla”, afirma Palacio.
