Carlos Hernández Quero, diputado nacional de VOX por Málaga, en recientes declaraciones, ha expresado una firme oposición a la ordenanza de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) propuesta por el Ayuntamiento de Málaga, así como por tantos otros Ayuntamientos a lo largo y ancho de España. Hernández Quero, quien fijó la posición de su grupo parlamentario durante un debate en el Congreso de los Diputados, ha criticado duramente la iniciativa, alegando que «beneficia sólo a una pequeña élite mientras perjudica a la mayoría de los malagueños».
En el caso particular de Málaga, la ZBE está programada para comenzar su implementación en breve, tras finalizar su tramitación, incluyendo un período de exposición pública y la aprobación final en el pleno municipal. La concejal de Movilidad, Trinidad Hernández, ha defendido la ordenanza como una medida crucial para combatir el cambio climático y gestionar el crecimiento poblacional proyectado para la región hasta 2050.
Sin embargo, Hernández Quero, en este sentido ha lamentado que los populares sigan comprando las políticas de la izquierda que «sólo defienden los intereses de unos pocos en detrimento de unos muchos”. Una problemática esta que, ha apuntado el diputado, desde VOX no es la primera vez que se pone sobre la mesa en Málaga. Y es que ya el pasado mes de septiembre, desde el GM VOX se presentó una iniciativa en la que Antonio Alcázar defendía que «Málaga requiere una estrategia de movilidad eficiente y efectiva, fundamentada en estudios realistas y opciones de transporte alternativas, sin restringir la libertad de movimiento de los ciudadanos».
«Málaga tiene muchos retos por delante en lo relativo a la movilidad, pero para los políticos parece que la prioridad es hacer las cosas más difíciles a las clases populares. Ellos son los verdaderos perjudicados de estas políticas. No son zonas de bajas emisiones, son fronteras de clase para que los trabajadores manuales, los comerciantes y las familias que viven en la periferia no entren al interior de la ciudad», ha declarado Hernández Quero. El diputado ha argumentado que la ZBE transforma el centro de Málaga en «una urbanización privada». «El malagueño medio cada vez tiene menos poder adquisitivo, ha sido desplazado hacia las afueras, tiene dificilísimo el acceso a la vivienda y encima ahora le dicen que el centro de su ciudad es un coto exclusivo para unos pocos».
Además, ha criticado las «políticas de subvenciones para vehículos eléctricos», que según ha explicado, «sólo son accesibles para quienes ya poseen una renta elevada». De esta forma, «se está estigmatizando y cargando de impuestos a los que más dependen de sus vehículos para trabajar, sin ofrecerles alternativas reales o asequibles,» ha añadido.
Hernández Quero también ha querido resaltar la obsesión del bipartidismo por las ZBE cuando, en su opinión, los principales problemas del país relativos a movilidad son otros: «el estado decadente de la red de cercanías en muchas provincias, la falta de tren de alta velocidad en algunas regiones, la ausencia de aparcamientos disuasorios a la entrada de las ciudades, los problemas de conexión de los pequeños municipios con las áreas más pobladas, la distancia a servicios básicos, los elevados peajes o las familias que no pueden tener más hijos por su incapacidad para cambiar de vehículo».
El diputado ha concluido su intervención apelando al gobierno y al Ayuntamiento que gobierna el Partido Popular en Málaga para que «reconsideren esta medida y busquen alternativas que verdaderamente beneficien a todos los ciudadanos, sin discriminación ni privilegios». Así, «España, y Málaga en particular, no deben convertirse en repúblicas de zonas de bajas emisiones que ignoren las realidades y necesidades de sus vecinos. Hay que poner en el centro el bienestar material de la mayoría social» ha sentenciado Hernández Quero.
