Ignacio Blanco: “Con Alu Ibérica, el consejero de Industria y el gobierno de Barbón han traicionado a Asturias; prefirieron la sumisión y la lealtad a la ministra”

“El consejero de Industria debe ser reprobado porque ha faltado a la verdad, aunque, si bien es merecida su reprobación, nos parece incompleta, pues tanta o más responsabilidad tienen Barbón y la ministra de Industria, como apuntan acertadamente los trabajadores de Alu Ibérica”
El portavoz y diputado de VOX Asturias en la Junta General del Principado, Ignacio Blanco, ha asistido hoy al Pleno de Industria que se celebra en el Parlamento asturiano.
A continuación realizó la siguiente intervención:
Quiero comenzar mi intervención señalando que VOX Asturias traslada la solidaridad hacia la situación de los trabajadores de Alu Ibérica, absolutamente desesperada, que como decía el consejero no lo justifica todo, y condenaremos cualquier acto de violencia verbal o física que se produzca independientemente de los motivos. Por tanto, trasladamos la solidaridad a los trabajadores como condenaremos cualquier acto violento hacia cualquier representante público asturiano. Dicho esto, es cierto que el debate de hoy se establece de una forma un poco particular, hay que responder una intervención del consejero de más de una hora de duración, inmediatamente después de que haya intervenido. No quiero perder la oportunidad para decir que nos congratulamos también de la gran presencia del consejo de Gobierno hoy en apoyo al consejero de Industria. Es una fecha para anotar en el calendario de esta Cámara.
Desde nuestro punto de vista, el discurso del consejero ha sido bastante incoherente. Intentó pedir a la oposición que planteáramos soluciones para la situación de Alu Ibérica, cuando gastó más de media hora en la parte inicial de su discurso en presumir de los objetivos que había conseguido el Gobierno asturiano. Nos pide ayuda a la oposición porque sus competencias no son ilimitadas, pero transcurre media hora de discurso colgándose medallas sobre los datos de la industria en Asturias. En este punto es muy incoherente. Todos sabemos que sus competencias son muy limitadas y que, por tanto, gran parte de esos datos que usted coge y selecciona muy adecuadamente que pueden ser positivos para la industria asturiana, no son de su responsabilidad y nosotros aquí tenemos que valorarlo por lo que ha hecho usted, no por datos que surgen en la industria.  Tenemos que valorarlo exactamente por lo que hizo, y usted faltó a la verdad en su discurso, porque sí que tuvo una influencia decisiva en que se optara por el grupo Parter inicialmente cuando usted asume la responsabilidad.
Este es el tercer pleno de industria que celebraremos esta legislatura. Siendo generosos, podríamos decir que los plenos de industria son absolutamente prescindibles. Ninguna propuesta de resolución de las aprobadas en los anteriores plenos de industria se ha ejecutado. Estos plenos de industria son básicamente la nada.
Es más, tras tres plenos de industria, el sector está hoy peor que cuando llegaron al poder Adrián Barbón que, desde nuestro punto de vista es el principal responsable de la situación de Alu Ibérica, y no el consejero, y Pedro Sánchez. Y queda mucho por sufrir en la industria. Así cuando dijo el consejero que la empresa y la industria asturiana enfrenta un futuro de éxitos creo que falta a la verdad también, y usted es consciente de que falta a la verdad. El Gobierno ha propiciado una inflación desbocada de los costes de producción, en concreto, el coste eléctrico. De hecho, el incremento del coste de producción, el incremento del coste del gas, el incremento de algunas materias primas de la industria, ha llevado a que los precios industriales en Asturias hayan batido récord este año. El incremento más alto de toda la serie histórica desde 2003 en Asturias. Tenemos un incremento de los precios industriales en Asturias de un 102% comparado con España que solo se incrementó, y que también es récord de la serie histórica, en un 35%.
Tras finalizar el pleno de hoy habremos perdido el día para que otros justifiquen su tarea parlamentaria, porque nada cambiará en la industria asturiana, en nada se aliviará la difícil situación de los trabajadores de Alu Ibérica, ya en concurso de acreedores, como advertimos hace muchos meses que acabaría en concurso de acreedores por decisiones equivocadas de este consejo de Gobierno.
Se baraja también la posibilidad de una nacionalización, parcial, temporal, de Alu Ibérica, con intervención de la SEPI que ya ha expuesto el consejero que contravendría normativa europea e incluso nacional. No creemos que sea la solución para Alu Ibérica. Cuando en su día ya no se querían arrancar las cubas de electrólisis con un precio de la luz en 40 euros, hoy sería una irresponsabilidad política el arrancar una actividad con un coste de la luz superando los 200 euros, y compitiendo con China que produce el 60% del aluminio mundial.
Hoy las decisiones políticas del pasado, de la que es responsable este consejo de Gobierno, llevan a que la situación de Alu Ibérica sea prácticamente irresoluble. Y no se van a poder recuperar las tasas de empleo que tenía Alu Ibérica. Usted dijo que en un futuro podríamos llegar a alcanzar con esos inversores la recuperación de las tasas de empleo; no falte a la verdad. Va a ser materialmente imposible. Ya no se produce prácticamente aluminio en Europa. Se fabrica una producción marginal en Noruega y la producción de aluminio está residenciada en China, India y Rusia, países contra los que no podemos competir en términos de costes de producción.
Hoy el debate se va a centrar en la reprobación del consejero. Porque usted mismo reconoció hace tiempo ya que a sabiendas de que Parter no era la mejor solución apostó por ella por lealtad institucional. Es decir, prefirió la sumisión, su carrera política a hacer lo correcto por Asturias. Cuando pudo no apostó por Asturias, apostó por la sumisión a la ministra y por su carrera política, no por Asturias. Y por eso hay que sancionarle. No por los muchos éxitos que usted dice tiene la industria asturiana, si no por las pocas decisiones que quedan bajo su competencia.  Por lealtad institucional traicionó a Asturias y por eso mismo que la reprobación del consejero es más que merecida.
Y si bien es merecida la reprobación del consejero, nos parece incompleta, pues tanta o más responsabilidad tienen el propio Presidente Barbón y la Ministra de Industria, como apuntan los propios trabajadores de Alu Ibérica.
Hoy, consejero ha tenido una oportunidad de oro para dimitir y ahorrarse este sufrimiento, este pleno en el que le aporrearemos dialécticamente todos los portavoces. Es una lástima, pero en fin, hay personas que disfrutan con el dolor autoinfligido, algunos lo llaman masoquismo. No conocía esa inquietante faceta personal suya.
De su intervención volvemos a constatar que no hay estrategia industrial del Gobierno de Asturias y, si la hay, llevan dos años y medio de legislatura y no se ha ejecutado.  Habló de proyectos futuros, de agenda futuro de la industria asturiana, pero no conocemos la materialización de esas estrategias suyas.
El objeto del debate de hoy se basará en la reprobación del consejero. Un consejero que en este caso es el fusible de ese circuito eléctrico que es consejo de gobierno para que la tensión eléctrica de este circuito no llegue hasta el propio presidente del Principado, que es el verdadero responsable de lo que sucede en Alu Ibérica.
El consejero tiene pocas competencias realmente en el ámbito de la industria. Por eso me reitero en que en aquellos casos en que sí tiene competencias y toma decisiones, como fue apostar por Parter en por lo que tenemos que reprobarlo, no porque la industria asturiana no consiga los estándares que pretendemos todos los diputados, si no por las decisiones que tomó el consejero y que perjudicaron directamente el proyecto Alu Ibérica y a todas las familias que dependen de ella. No deja de ser en muchas ocasiones un bonito adorno, incluso un saco para recibir golpes, como hoy. Pero lo lamentable es que cuando pudo, no se puso del lado de Asturias, como sucedió con Alu Ibérica.
Si todo sale como debería ser, usted será reprobado, pero esa reprobación no servirá para revertir la situación de la industria asturiana, ni siquiera para ayudar a los trabajadores de Alu Ibérica que sufren las consecuencias de una de sus primeras decisiones, apoyar a sabiendas la peor opción para la planta de Avilés.
Debe ser reprobado porque no es precisamente el consejero de los éxitos. A Alu Ibérica se unen otras deslocalizaciones o severas crisis, como Vesuvius, Expal, Vauste o Tenneco. Debe ser reprobado por su incapacidad para modificar un estatuto de las electrointensivas que perjudica a la gran industria asturiana. Debe ser reprobado. porque se utiliza como excusa, como se hace algo, las alianzas por ia Industria que se han demostrado inválidas para conseguir algo para la industria cuando es usted el que la lideró.
Y debe ser reprobado porque ha faltado a la verdad, y no solo lo digo yo, lo dicen también los trabajadores de Alu Ibérica. Hemos escuchado todos los estamos aquí, lo que se decía hace un momento a la entrada del pleno: ‘consejero dimisión; Barbón dimisión’. O aquellos que le dijeron: ‘irresponsable, temerario, mentiroso, vendido…’ Este es el sentimiento que verbalizan los trabajadores sobre su gestión y la del presidente Barbón.
Con Alu Ibérica se traicionó a Asturias. Su gobierno, Barbón, traicionó a Asturias. Cuando pudo no apostó Asturias, apostó por lealtad institucional. Ustedes sabían y los trabajadores les habían advertido que no era la mejor opción y aun así prefieren la sumisión a la ministra de Industria y la lealtad a intereses políticos antes que la lealtad por Asturias. Cuando, de entre sus pocas competencias pudo hacer algo, prefirió la lealtad a la ministra de Industria que su lealtad a Asturias no decidió en favor de Asturias, decidió en favor del PSOE y de su carrera política. Sólo por esto debe ser reprobado.
Hoy podremos reprobar al consejero, pero poco más. Asturias por sí sola no puede revertir la situación de la industria, no somos una autarquía en términos industriales. Muchas de las normas que afectan a nuestra industria hoy no salen de este parlamento, prácticamente ninguna, dependen de órganos que están muy lejos de Oviedo, dependen del congreso de los Diputados, dependen de Europa y por eso decimos que Asturias, en este caso, no puede influir sobre la deriva de la industria. Necesitamos a todo el país, es otra de las grandes limitaciones del estado autonómico. Asturias, a pesar de lo que dice el presidente del Principado, no es dueña de su destino, sería dueña de su destino junto con España. Una reindustrialización de nuestra región necesita a todo el país.
Lamentablemente nos gobierna Pedro Sánchez, que tras bajarse el pasado sábado en Gijón de su Falcon nos dejaba un titular para enmarcar, decía, ‘el Gobierno de España será el mayor aliado de Asturias en Infraestructuras, Ganadería e Industria’. No sé quién fue el insensato que le preparó ese titular. Espero que no haya sido Barbón, porque se nota ya mucho la falta de Iván Redondo en el gabinete del Presidente.
Es evidente que Pedro Sánchez no conoce la situación asturiana. Tocó precisamente las tres plagas bíblicas con las que el PSOE nos castiga a los asturianos: infraestructuras, ganadería e industria. No pudo meter el dedo es más llagas. No sé cuántas llagas más tenemos los asturianos para que diga esta sandez el presidente del Gobierno.
Asturias, trasládeselo al presidente Sánchez porque a lo mejor no se lo dijo usted, porque presumiendo tanto como presume no cuenta ni la realidad de la situación asturiana, será la única comunidad que el AVE no llegue o a la capital o a la ciudad más poblada; de las conexiones aéreas ni hablamos, lo único que sí voló fue la autopista del mar, que voló a la comunidad vecina, a Galicia; el suroccidente está abandonado a su suerte, con el Huerna somos el acceso por carretera más caro del norte de España; la ganadería desesperada ha tomado Oviedo y Madrid y volverán a salir a manifestarse. Las ayudas al campo se reducen, los costes de producción superan los ingresos, el lobo se ha incluido en el Lespre, los cazadores abandonan los cotos…
Centrándome en la industria. La industria ha sufrido un declive espectacular, sobre todo en Asturias. Porque Asturias siempre fue una región muy industrial, en 1975 la industria asturiana aportaba el 50% del PIB regional y empleaba a más de 115.000 asturianos, hoy no llegamos a los 50.000 trabajadores y aporta poco más del 12% del PIB.
A día de hoy, a pesar de todas las medallas que se colgó, infundadamente el consejero al inicio de su intervención y que matizó al final que no son su responsabilidad porque tiene pocas competencias en la materia, en Asturias actualmente la cartera de pedidos del sector desciende año a año y muchas empresas están valorando la deslocalización.
Nos hizo una pequeña comparación muy parcial de cifras de 2021 con 2020. Es difícil que una comparación así salga mal en ningún sector, pero las carteras de pedidos descienden cada año. Los índices globales con el resto de España siguen empeorando. En Competitividad ocupamos el puesto 15 de 17 comunidades; en Índice de Innovación estamos en el 11 de 17; en Libertad Económica el 15 de 17 y la última posición en Actividad Productiva.
Sólo en 2021 cerraron más de 1.700 empresas en Asturias. Y lo peor está por llegar, y no se está haciendo nada por evitarlo porque el incremento de los costes de producción, muchos de ellos, suben el precio debido a decisiones políticas, a estas políticas de los que defienden el Acuerdo de París, de la descarbonización exprés, de la Agenda 2030, todas esas políticas son las que están repercutiendo en los costes de producción. No se está haciendo nada y ustedes siguen defendiéndolas.
El futuro de la industria asturiana y española, incluso europea es muy negro y no están haciendo nada para evitarlo. Como comentaba al inicio de la intervención, los precios industriales han triplicado el incremento a nivel nacional, más de un 100% en lo que va de año. Y no sé dónde ve ese panorama tan despejado para la industria asturiana. Tenemos una inflación a cierre de año al 6,5%, los precios de la luz están por encima de los 200 euros para la industria, el coste de gas, los costes de emisión de CO2, todo esto anticipa la tormenta perfecta. Pero hasta que no deje de gobernar la izquierda, hasta que no dejen de gobernar con la extrema izquierda, -los que defiende los Acuerdos de París, la descarbonización exprés, y la Agenda 2030-, mientras que el PSOE, IU y Podemos, no dejen de gobernar, la industria no tendrá ninguna alternativa de futuro ni en Asturias ni en España.
 Muchas gracias