El presidente de grupo parlamentario de VOX en el Parlament de Catalunya, Ignacio Garriga, ha asegurado este lunes que “a lo largo de esta legislatura no se va a aprobar ninguna declaración institucional” en la cámara catalana, porque el partido está harto de que se le aparte “de manera sistemática” de la deliberación o aportación de cualquier texto que se pretende aprobar en esta institución.
Garriga ha dejado claro que VOX se mantendrá firme en su decisión con la clara intención de que el separatismo y la izquierda rompan con su “cordón profundamente antidemocrático que desprecia a más de 200.000 catalanes” que han votado al partido y lo han convertido en la cuarta fuerza política en el Parlament.
Por otro lado, ha señalado que tanto las formaciones separatistas como las de la izquierda han “despreciado” a los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado que operan en Cataluña, es decir, a policías locales, a Mossos d’Esquadra, Policía Nacional y Guardia Civil, porque “no han querido ni siquiera considerar la propuesta que VOX planteó hace unas semanas”, debido únicamente a que había sido elaborada por el partido. “No es nada nuevo porque los delincuentes metidos a políticos han puesto a los cuerpos policiales en el foco de la negociación del nuevo gobierno de Cataluña”, ha asegurado.
En este sentido, el presidente del grupo parlamentario ha afirmado de forma rotunda que es “bochornoso y lamentable” que el nuevo gobierno de la Generalitat, que ha de “dar respuesta a la emergencia social, sanitaria y económica” de todos los catalanes, “se esté negociando en una cárcel”. Este hecho “demuestra la catadura moral instalada en esta institución” y ha recordado que mientras sigan rompiendo el principio de neutralidad propio del Parlament, “VOX estará vigilante para denunciar todas sus tropelías” y exigir que las instituciones estén al servicio de todos los catalanes y lejos de “sectarismos y demonizaciones”.
En relación a la distribución de los partidos en el hemiciclo, Garriga ha lamentado el nuevo desprecio hacia a VOX y ha reconocido que, por desgracia, al partido no le sorprende porque es consciente de la voluntad antidemocrática del separatismo. Sin embargo, como ya ha afirmado anteriormente, “ya nos pueden poner en el gallinero del Parlament o en el mismo Zoo que no van a conseguir silenciarnos ni cambiar nuestro discurso ni un solo milímetro”. VOX no va a dar ni un paso atrás y perseverará “hasta la victoria final”.
