jose-manuel-marin

José Manuel Marín: «Estamos ante un nuevo episodio de adoctrinamiento y propaganda ideológica»

Denuncia el peligro en que se encuentran «la libertad de cátedra, de debate y de expresión»

«La Ley de Convivencia Universitaria no aporta nada ni resuelve nada». Así de contundente se ha mostrado el senador de VOX por Murcia, José Manuel Marín, en la Comisión de Ciencia, Innovación y Universidades, que se ha celebrado en el Senado, donde se ha debatido el Proyecto de Ley de convivencia universitaria, una norma que Marín ha considerado «un nuevo episodio de adoctrinamiento y propaganda ideológica”.

El senador ha explicado que «una Ley de Convivencia Universitaria tiene que estar guiada por el principio del respeto de las diferentes ideologías políticas». Por ese motivo, según Marín, «esta Ley debe proteger a aquellas personas que por su discrepancia con la izquierda o el separatismo ven erosionada su libertad para organizar actos académicos en apoyo a la unidad nacional».

Lo que realmente está en peligro, en palabras de Marín, es «la libertad de cátedra, de debate y de expresión» ya que también que existe una intimidación ideológica contra los profesores, alumnos y oradores invitados, si son de una tendencia más «conservadora». En definitiva, «está en peligro el espíritu universitario» y es «muy grave», ha denunciado.

Ideología obligatoria

Además, Marín ha recordado que VOX presentó una PNL en el Congreso en la que se instaba al Gobierno a intervenir para garantizar la libertad de expresión en la universidad, pero, «como viene siendo habitual», fue rechazada, «como todo lo que proponemos», ha lamentado.  

 «Los grupos independentistas no quieren un plan de convivencia y respetuoso con todas las ideologías» sino «una Ley que les facilite la impunidad en su afán por convertir su ideología en obligatoria, mediante acoso y agresiones». Y es que, para el senador, la universidad debe ser «un centro de estudio y preparación académica y formación intelectual, y no un campo de experimentos políticos»,

Por ello, ha condenado todo acto violento contra cualquier persona, «ya sea en razón de su orientación sexual, de su raza, de sus ideas políticas o de cualquier otra consideración», ha sentenciado el senador.