La diputada del Grupo Parlamentario VOX en las Cortes Valencianas, Julia Llopis, ha mostrado, en El Pleno de este miércoles, una camiseta con el rostro del diputado Vicent Marzà para recordar el momento en el que el Botánico aprobó la Ley Educativa 4/2018. Posteriormente, se la ha entregado al diputado.
A continuación, Llopis ha hecho referencia a que “esta camiseta la llevé, junto con otros diputados, cuando se aprobó esta ‘ley sectaria’ porque en aquel entonces, no vinimos a aplaudirles, sino a mostrar nuestro rechazo e indefensión. Pues el entonces conseller Marzà en su afán de imponer su totalitarismo lingüístico, disfrazó el decreto sectario y fallido, ante el varapalo judicial, en una ley, porque sabía que, de esa forma, ni la comunidad educativa ni la sociedad civil podrían volver a ganarle en los tribunales.”
La diputada se ha referido a Compromís y el PSOE y les ha asegurado que “pueden quedarse tranquilos, porque la nueva ley en breve estará en marcha. Este equipo de Gobierno cumplirá con lo prometido y estará pendientes de que las familias tengan la libertad de elegir la lengua, centro educativo y el modelo de enseñanza que deseen para sus hijos, así como la calidad educativa, eliminando así cualquier ideología o sectarismo que corrompa, manipule o adoctrine a los alumnos.”
“Hoy para mí y para mucha gente, es un día muy especial, después de dos largas legislaturas donde la consellería de Educación liderada por Compromís solo tuvo un objetivo: implantar un ‘procés a la valenciana’. Este supuso una descomunal imposición lingüística y un sectarismo ideológico en los colegios, enfrentando a la sociedad y limitando la libertad para el uso del castellano. Nunca hubo enfrentamientos ni conflictos con el uso del castellano o valenciano, hasta que llegó el Botánico.”
Julia Llopis ha detallado que ahora “VOX y PP ha trabajado por una nueva Ley de Libertad Educativa, que antepone el interés del alumno y la libertad de las familias por encima de cualquier interés político. Por ello, esta permitirá que los alumnos de la Comunidad Valenciana adquieran competencias lingüísticas en valenciano, castellano e inglés. En las zonas valenciano-parlantes se respetan los porcentajes (un 25%) que, según las diferentes etapas educativas, deben atribuirse como mínimo a cada una de las lenguas cooficiales y poder optar a un máximo en inglés. En las zonas castellanohablantes también podrán elegir la lengua base.”
Llopis ha afirmado que “también es inclusiva porque contribuye al desarrollo y avance de los alumnos con necesidades educativas espéciales al garantizar su formación continua e integral en el uso de su lengua materna y cumple con la legalidad, al acatar las atribuciones otorgadas por ley a los centros educativos en lo referente a la autonomía organizativa y pedagógica de los mismos.”
Finalmente, la diputada ha recordado que “son muchos los logros que hemos conseguido. El primero fue el de tumbar judicialmente el decreto plurilingüismo 09/2017, sectario, ideologizado y politizado, que discriminaba a los alumnos según que lengua hablasen y clasificaba a los alumnos en básicos, intermedios y avanzados. Es decir, en malos, regulares y buenos según su nivel de valenciano. Después dicen ser los que defienden la igualdad y la inclusión, vaya chiste.”