Esta semana han sido publicadas las sentencias que anulan la sanción al doctor Francisco Gómez Soto y a la doctora Ana María Valero Lite por grabar unos segundos de vídeo en sus despachos del hospital de Tomelloso. Demostrándose así el acoso al disidente que se realiza por parte del SESCAM
En las sentencias, con similares argumentaciones, se recogen las contradicciones que habían servido para sancionar al médico:
“El tenor de la norma parece referirse a la necesidad de autorización para entidades o personas ajenas o externas al centro sanitario, y precisamente la Resolución indica que el recurrente debería haber pedido autorización porque actúa como ciudadano particular, sin embargo al mismo tiempo considera que esta conducta se encuentra dentro del ámbito de la responsabilidad disciplinaria por cuanto se llevó a cabo en horas de trabajo, lo que constituye una evidente contradicción”
Según la propia sentencia se culpa al señor Gómez Soto de no haber pedido permiso para grabar dentro de las instalaciones del hospital, cosa que deben hacer los ciudadanos particulares ajenos al centro. Y a su vez se le abre un expediente disciplinario por realizar esa grabación en horas de trabajo, luego no es un ciudadano particular ajeno al centro.
Las sentencias también recogen contradicciones del propio Director Gerente del Hospital de Tomelloso, quien llega a decir en el propio juicio que los profesionales del centro pueden hacer grabaciones sin pedir permiso, e incluso difundirlas, sin pedir permiso a la Gerencia.
“El propio Director Gerente del Hospital de Tomelloso en el momento de los hechos, quien en el acto del juicio matizó esta obligación de autorización, al indicar que los profesionales sanitarios pueden sin pedir permiso realizar fotos, grabaciones incluso difundirlas dentro de los centros cuando se trata de actos lúdicos, o festivos”.
Por último, las sentencias, que anula la sanción de suspensión de empleo y sueldo de ambos doctores, afirma que no se entiende por qué la grabación del vídeo necesitaba de autorización si no existían imágenes que afecten a la intimidad, ni se identifica al centro sanitario.
“Tampoco se especifica en la Resolución por qué si no existen imágenes que afecten a la intimidad, como bien dice el Instructor en su Propuesta, ni se identifica el Centro sanitario, ni en definitiva se conculca la finalidad de la Circular 6/2004 que es proteger el derecho a la intimidad y la propia imagen, sin embargo esta grabación precisaba de autorización”.
Con estas sentencias se vuelve a poner de manifiesto la falta de libertad de los profesionales sanitarios en Castilla La Mancha, puesto que son acosados, perseguidos y sancionados si se salen de la “línea oficial”. Como en este caso, donde dos facultativos del hospital de Tomelloso ha sufrido la sanción disciplinaria antes de que los tribunales decidieran si era o no procedente dicha sanción.
También saltó la noticia, poco después de que la prensa se hiciese eco de las sentencias, de la dimisión de la Gerente del Hospital de Tomelloso. Aduce motivos personales.
Pero después del revés judicial de esta semana para esta gerente también nos enteramos que había cesado a la doctora Valero como jefa de servicio de anestesia durante una baja laboral. Sólo cuando recibió un escrito del abogado sindical advirtiéndole de la ilegalidad del acto rectifico.
El constante acoso a nuestros afiliados al final le ha costado el puesto al acosador. Nuestros compañeros se reservan el derecho a emprender cuantas acciones crean oportunas para restituir todo el daño causado.
