Sara Á. Rouco: “La gestión en los centros tutelados de menores no transmite a la sociedad sensaciones positivas, más bien al contrario”

“Además del desarraigo y la consiguiente alteración en sus relaciones sociales, la norma en estos centros es el descontrol y la potenciación de los problemas conductuales previos”

La diputada de VOX, Sara Álvarez Rouco, tras preguntar hoy en la Junta General a la Consejera de Derechos Sociales y Bienestar sobre cómo se están gestionando los centros de menores tutelados en Asturias, expuso que, según datos del Principado a fecha de febrero de 2024, “en la actualidad, hay 715 menores tutelados en Asturias bajo la dependencia de la Consejería de Asuntos Sociales. De ellos, 372 lo están bajo la custodia de familias de acogida y 343 se encuentran en alguno de los 15 centros repartidos por nuestra geografía”.

En primer lugar, Álvarez Rouco solicitó el criterio que sigue la consejería para que “mediante un proceso meramente administrativo, un proceso subjetivo en el que no hay garantías judiciales, un menor sea declarado en desamparo y se vea apartado de su familia, sin previa renuncia de su custodia y atención por parte de sus ascendientes, para después ser ingresado en un centro tutelado de menores”.

En segundo lugar, la diputada de VOX pidió explicaciones por “la razón por la que los menores, una vez institucionalizados, en lugar de disfrutar de una vida mejor, pasan a sufrir las consecuencias de una falta de control sobre sus conductas que les permite ausentarse de los centros durante días, semanas o meses, de modo reiterado y sin que se ponga remedio a estas fugas”.

Sara Á. Rouco criticó la gestión de estos centros de menores “en los que, además del desarraigo y la consiguiente alteración en sus relaciones sociales, la norma es el descontrol y la potenciación de los problemas conductuales previos”, y aludió a “hechos contrastados, como demuestran los muchos casos de menores fugados aparecidos en medios de comunicación, tras sufrir violencia, consumos de sustancias nocivas o drogas, o ser agredidos o explotados sexualmente”

Finalmente requirió conocer “los motivos por los que la gestión de estos centros tutelados no incluye la aplicación de protocolos dirigidos al retorno a las familias propias, después de haberles facilitado a sus padres o responsables los elementos necesarios para dar una vida digna al menor. Si el ‘bien superior’ para los niños y jóvenes menores es crecer en su entorno familiar junto con sus padres, y para estos tener a sus hijos con ellos, ¿qué explicación tiene no dar preferencia a solucionar los problemas en la familia de origen y retenerlos hasta la mayoría de edad en un entorno que, frecuentemente, potencia sus problemas?”.

“La gestión en los centros tutelados de menores no transmite a la sociedad sensaciones positivas, más bien al contrario. Y si ya estamos en el siglo XXI, es necesario que el gobierno socialista explique por qué la gestión en estos centros despide la misma sensación de angustia y dolor que en épocas pasadas”, concluyó Sara Á. Rouco.