21 diciembre, 2019
La diputada de VOX en la Junta General del Principado, Sara Álvarez Rouco, se refirió esta tarde al informe emitido por la Sindicatura de Cuentas que “deja en evidencia el control de las subvenciones del Principado”. Según explicó la diputada “es un compendio a la carta de descontrol, de despilfarro y de deuda” y considera que “el informe de la cuenta general se emite con salvedades”. “No se controlan las subvenciones nominativas desde el año 2016 en la mitad de las consejerías. En el año 2018 solo el 0,26% del importe total de las nominativas se sometieron a auditoría de cumplimiento. Es decir, las subvenciones se dan a conveniencia, no se justifica su otorgamiento y no se controla su gestión”, descalificó Álvarez Rouco.
Para la diputada, “el documento de la Sindicatura de Cuentas no hace más que confirmar lo que defiende el Grupo Parlamentario VOX y es que las subvenciones de Asturias son el elixir del clientelismo del gobierno del PSOE al que lamentablemente ya tiene acostumbrados a todos los asturianos. La lectura es clara, llevan a Asturias a la deriva. Es un sinsentido”.
A juicio de la diputada “no existe realmente un plan de contabilidad pública del Principado de Asturias, lo que apareja grandes problemas a la hora de fiscalizar. Una vez más se prorroga el endeudamiento en el ejercicio fiscalizado sin concretar el destino de la deuda, lo que ya fue fuente de problemas y anulaciones porque supuso conceder libertad absoluta a la Consejería de Hacienda para hacer y deshacer a su criterio”. “Es una vergüenza el descaro del Gobierno socialista y del resto de partidos vendidos al poder ante un nivel de endeudamiento del sector público que compromete el Presupuesto General del Principado”, señaló Álvarez Rouco.
En cuanto al informe relativo al sector público, indicó la diputada, “refleja que los 47 chiringuitos son opacos, ineficientes y consumidores del erario público. Más del 10% no rinde cuentas correctamente y casi la mitad no cumple con la Ley de Contratos del sector público”. La realidad, remarcó, es que “el sector público se come los impuestos de los asturianos. Desde VOX exigimos que se audite y se liquide lo que no sea eficiente y realmente transparente”.
“Gispasa, RTPA, ZALIA, Sedes y Sogepsa, -continuó la diputada-, recogen en sus auditorías una incertidumbre material relacionada con el principio fundamental de la contabilidad como es el de empresa en funcionamiento y la Sociedad Pública de Gestión y Promoción Turística y Cultural del Principado de Asturias (SGPTC) está incursa en una importante inspección de Hacienda”. “Si vamos al endeudamiento asciende a un total de casi 6 millones de euros, lo que genera más de 15 millones de gastos financieros. Consumen del Principado en transferencias 119.737.665 euros”, puntualizó.
“Solo Sogepsa, ZALIA y Gispasa aglutinan el 87% de la deuda de las empresas públicas. Zalia presenta un patrimonio neto inferior al 50% del capital social por lo que se encuentra en causa de disolución. Sogepsa debe solo en préstamos, más de 82 millones al Principado. La única razón de que no estén también en causa de disolución es que sus deudas son a largo plazo y están convenientemente avaladas por todos”, concluyó la diputada.
