‘Socialismo y comunismo son máquinas de crear ruina, muerte y miseria’, por Daniel Arias

El presidente provincial de VOX Toledo, Daniel Arias, valora la ley de eutanasia en este artículo de opinión.

Que el socialismo y el comunismo son máquinas de crear ruina y miseria allá donde se implantan es un hecho tan claro y objetivo que deberían estar condenados al ostracismo desde hace décadas pero, por contra, siguen esparciendo su podredumbre material y moral a lo largo y ancho del planeta bajo el envoltorio de una consecución de falsos e inventados derechos, que no son más que trampantojos cuya única finalidad es perpetuarse en el poder.

Por desgracia los castellano-manchegos padecemos esta lacra en el Ejecutivo nacional y regional. Gobiernos que, muy lejos de ser diferentes, son almas gemelas cuando se trata de promocionar sus postulados ideológicos para mantener sus poltronas, cargos y prebendas.

Así, el último ejemplo lo hemos visto con la llamada “ley de eutanasia”. Una ley que fue aprobada en el Parlamento español en marzo del presente año, y para la que la consejería de Sanidad de Castilla La Mancha ya ha publicado una guía respondiendo a las “preguntas frecuentes” que dicha ley pudiera suscitar.

Es tentador, lo confieso, refutar los diez puntos que contiene esa guía, pero si algo he aprendido en este tiempo es que leyes como esta se combaten negando la mayor y no cediendo ni un milímetro. Y negar la mayor es decir alto y claro que un gobierno debe dedicar todos sus esfuerzos en luchar porque la vida prevalezca, sea en el caso que sea porque, como dijo San Juan Pablo II “el respeto a la vida es fundamento de cualquier otro derecho, incluidos los de la libertad”.

Podría hablar de cómo el socialismo atribuye esta ley a una falsa demanda social, de cómo quiere compatibilizar el derecho a la  vida con el derecho a la muerte, de la división que va a crear entre médicos que quieran aplicarla y los que por conciencia no lo hagan, de las dos abominables formas de llevarse a cabo o de los daños psicológicos que puede acarrear al personal sanitario que la aplique, pero no lo voy a hacer porque para nosotros, para VOX, es mucho más simple que todo eso, es que frente a la cultura de la muerte que ve al ser humano desde un punto de vista material y utilitario, como sólo sabe verlo la izquierda, nosotros apostamos por la cultura de la vida, por fomentarla, cuidarla, protegerla y acompañarla como el don más preciado que tenemos.

Por esta razón, en Septiembre de 2020 propusimos en el Congreso de los Diputados una ley de cuidados paliativos, la cual, entre otras propuestas, incluía los cuidados paliativos en los planes de estudio de los grados relacionados con las ciencias de la salud, garantizaba los derechos de acompañamiento así como la intimidad personal y familiar de los enfermos, contenía asistencia espiritual para quien la desease, además de atención y apoyo a las personas cuidadoras y a las familias de los pacientes, incluso con acceso a permisos laborales retribuidos durante el acompañamiento.

Asimismo, el pasado mes de junio VOX presentó un recurso de inconstitucionalidad al creer, entre otras razones, que esta ley choca frontalmente con el inalienable derecho del ser humano a la vida.

Los gobernantes, con sus actos, no sólo provocan efectos materiales a las sociedades en las que gobiernan, sino que, con dichos actos, mandan mensajes a los individuos que las conforman.

Cuando gobierna la izquierda, ya sea a través de la ley del aborto o la de eutanasia, manda el mensaje de no creer en el ser humano ni en su belleza (en el sentido más amplio y profundo de la palabra).

Desde VOX ahora desde la oposición, mandamos un mensaje de esperanza en el ser humano, de unión, de libertad y, sobre todo y ante todo, de vida. Cuando gobernemos que nadie dude de que lo llevaremos a cabo.