Memoria histórica

Vox al Gobierno Vasco: que deshece definitivamente tramitar la ley de Memoria Histórica

Exige que las consejeras Garamendi y Artolazabal expliquen un error que demuestra su incapacidad y qué pretenden hacer con un proyecto de ley para la desmemoria y el revanchismo

“La mejor de todas las alternativas posibles es la retirada del proyecto de Ley de Memoria Histórica y descartar una iniciativa cuya única pretensión es la de reescribir la historia poniendo el acento en unas violencias y olvidando otras que son incómodas para el nacionalismo y el independentismo vasco, como la ejercida por ETA también en el ámbito temporal al que se circunscribe el proyecto legal en cuestión”.

Amaia Martínez, parlamentaria vasca de Vox, rechaza frontalmente resetear el proceso como pretendería el Gobierno Vasco, “cuyo único fin es el de no demorar en exceso la aprobación de una ley que interesa a los partidos del cordón antidemocrático para reforzar su propia campaña de imagen, para alimentar el revanchismo y para contribuir al blanqueamiento de ETA y su entorno”.

Hoy se ha sabido que el ejecutivo de Íñigo Urkullu remitió al Parlamento Vasco un anteproyecto de ley antiguo y no el que pretendía convertir en ley, algo que atribuye a «un error humano». Para Vox en la Cámara vasca, esta es una prueba más de la incompetencia del lehendakari y su equipo, “de la que ya ha dejado sobradas muestras en la gestión de la pandemia”. “Hasta tal punto llega que han estado discutiendo y debatiendo un documento que surgió del propio Gobierno y que sus promotores y defensores trataron como bueno en todo momento”.

En este contexto exige la comparecencia en el Parlamento Vasco no sólo de la secretaria del Consejo de Gobierno sino también de la consejera responsable del proyecto. “Tanto Olatz Garamendi como Beatriz Artolazabal han de explicar en sede parlamentaria qué ha sucedido para enviar al Parlamento un anteproyecto antiguo y cuáles son sus planes para el futuro inmediato. Sería un hito de esta legislatura que el Gobierno del rodillo reconociera un error y actuara en consecuencia”.

En la actualidad son varias los proyectos de ley que se debaten en torno a lo que la izquierda, la ultraizquierda y los nacionalismos, secesionistas o no, han denominado memoria histórica, “una visión partidaria y partidista de una parte de nuestro pasado que ni es memoria ni es historia. Es más, es un burdo ejercicio de desmemoria y un intento obsceno de determinados partidos políticos, entre ellos el PSOE y el PNV, de manipular lo sucedido en España durante décadas”.

Amaia Martínez insiste: “sólo es admisible que tanto Olatz Garamendi como Beatriz Artolazabal den explicaciones en sede parlamentaria y anuncien la retirada definitiva de un proyecto de ley revanchista y que, a través de la manipulación, va a dificultar la convivencia entre personas con ideologías y pasados diferentes”.