VOX ha presentado una denuncia contra la concejal de Cultura, Memoria Democrática, Feminismo y LGTB del Ayuntamiento de Castellón, Verónica Ruiz, por su intención de retirar la Cruz de los Caídos del parque Ribalta.
Se trata de un monumento que, una vez despojada de su simbología originaria, ha quedado como un monumento religioso que no contraviene las disposiciones legales sobre memoria histórica. Es decir, la Cruz de los Caídos del parque Ribalta es compatible con la legislación sobre memoria histórica de las originarias cruces de los caídos posteriormente resignificadas, según reiterada jurisprudencia.
Para la formación, la retirada de la cruz, propiciada por los partidos que componen el Acuerdo de Fadrell, obedece exclusivamente a motivos ideológicos obviando su resignificación de 1979.
VOX considera que el Gobierno municipal miente al afirmar, sin prueba alguna, que la cruz “sigue siendo en la actualidad un signo de exaltación de la guerra civil y de la dictadura por ser punto de concentración para la exaltación del franquismo en fechas concretas.” De hecho, la formación se apoya en el informe jurídico del secretario general de la administración municipal no puede concluir que la Cruz del parque Ribalta sea un vestigio franquista.
Precisamente, uno de los elementos esenciales del delito de prevaricación administrativa es que la resolución sea arbitraria y dictada a sabiendas de su injusticia. En definitiva, “por su evidente falta de objetividad, dicha actuación administrativa no se encuentra en sintonía con los principios básicos que rigen toda actuación de la Administración, tal y como se postula en el artículo 103.1 de la CE y, más en concreto, en el artículo 3.1 de la Ley 40/2015, de 1 de octubre, de Régimen Jurídico del Sector Público”.
Así, VOX solicita que se suspenda, de forma cautelar, el Decreto Decreto 2021-5229, de 26 de julio de 2021, por el que se acuerda la retirada de la Cruz del parque Ribalta. Advierte, además, la formación de que “la mera retirada causará un irreparable perjuicio de índole moral a los miles de ciudadanos que profesan la religión cristiana”.
