Vox denuncia la discriminación que sufren las familias que eligen guarderías privadas para sus hijos

El Grupo Parlamentario presenta una iniciativa en el Parlamento para que las familias que necesitan utilizar las guarderías privadas en Cantabria puedan deducirse dicho gasto en el IRPF.

El Grupo Parlamentario Vox en Cantabria defenderá el próximo lunes una Proposición no de Ley que busca que las familias que confían sus hijos a las guarderías privadas, puedan deducirse dicho gasto en la declaración de la renta.

Actualmente, para que las familias puedan deducirse los gastos de guardería en el IRPF, el centro en el que matriculan a sus hijos debe tener “licencia municipal y autonómica”, lo que deja en Cantabria a decenas de centros fuera de este requisito.

Para Cristóbal Palacio, Portavoz de Vox en el Parlamento, el Gobierno está “impasible ante la discriminación que sufren los padres que matriculan a sus hijos en las guarderías privadas” ya que “conoce el problema desde hace meses y no ha movido un dedo para solucionarlo”.

Palacio afirma que “los cambios legislativos pasados” dejaron a las guarderías en un “limbo legal” que “nadie se ha preocupado de corregir” dejando “abandonadas” tanto a las familias que llevan a sus hijos a estas guarderías como a las empresarias que dirigen estos centros “durante años”.

“Nos encontramos ante un agravio comparativo ya que, otros centros públicos que tampoco dependen de educación, tienen autorización para la deducción por gastos de guardería; mientras que los centros privados, no”,subraya Palacio, que se refiere a los Centros de Atención de Primaria Infancia (CAPI) que dependen del ICASS y cuyos usuarios sí pueden aprovechar dicha deducción.

Para Vox, “existe una discriminación sobre estos centros”, que calculan en alrededor de 70 las guarderías afectadas y cerca de 2.500 familias. “Realizan una labor no solo asistencial, también educativa y los padres confían en ellas a sus hijos mientras que la Administración tiene a estos centros en el olvido”.

“Es una estrategia que se observa desde la primera etapa educativa en la que la administración margina y asfixia a la educación privada de forma subliminal, dejándolos fuera de ayudas transporte, comedor, etc. y, como en este caso, sin la posibilidad de la deducción en el IRPF. Al final, obligan a las familias a elegir la educación pública por sus ventajas económicas y no por criterios educativos”, manifiesta Palacio.

El Portavoz de Vox busca “una solución rápida” que sea el comienzo de una serie de medidas “necesarias” que mejoren la situación actual de las guarderías privadas, “marginadas” por la administración pública y “fundamentales” para las familias cántabras.