La excesiva carga burocrática que experimentan las instituciones europeas, y en consecuencia, los ciudadanos de los países miembros, siempre ha sido centro de cuestión por los grupos políticos que quieren transformar el sistema de leyes europeo, que, con el tiempo y paradójicamente, es cada vez más inaccesible.
En el escrito que el grupo europeo de los Reformistas y Conservadores en el Parlamento Europeo (ECR) ha trasladado a la Presidenta de la Comisión Europea Ursula von der Leyen, y con el apoyo de la delegación de VOX Europa, se ha querido reivindicar que el exceso de regulación en las bases legales europeas hace que la creación de empleo, la accesibilidad al sistema o el crecimiento de los países miembro se vea en un constante retroceso.
Así, con la implementación de la política “one in, one out”, iniciativa de ECR y con el respaldo de eurodiputados como el jefe de la delegación de VOX en Europa, Jorge Buxadé, Charlie Weimers o Eugen Jurzyca entre otros, se quiere proporcionar un sistema estable que evite una hiperregulación; por cada nueva regulación que se apruebe en Europa, ha de revisarse una ya implementada e ineficaz y eliminarla.
En el escrito enviado a la presidenta de la Comisión, los eurodiputados del ECR preguntan si esta política se ha empezado a implementar ya en los propios servicios del Ejecutivo comunitario y si se sabe algo de los instrumentos para aplicarla en la legislación futura de la Unión Europea, así como la relación de regulaciones y decisiones eliminadas en virtud de la misma.
De esta manera el grupo ECR y VOX Europa, siguiendo políticas que tan eficazmente han funcionado en el EEUU de Trump, se consigue que la burocracia se aligere para allanar el camino de los ciudadanos, que solo encuentran barreras a la hora de acudir a una administración tan desgastada por el exceso de normas institucionales.