VOX Melilla critica la imposición del tamazigh por el Gobierno local

Tasende: “Pretenden establecer el tamazigh como lengua vernácula de Melilla para, a continuación, dotarla de protección oficial en nuestra Ciudad”

Las recientes declaraciones sobre la lengua tamazigh por parte de responsables del tripartito que “desgobierna” la Ciudad vienen a confirmar, si falta hacía, lo que VOX denuncia desde hace tiempo: “Pretenden establecer el tamazigh como lengua vernácula de Melilla para, a continuación, dotarla de protección oficial en nuestra Ciudad”. El plan del Ejecutivo es hacerla cooficial, incluirla en los programas de estudio, subvencionar publicaciones y todo un despliegue de gastos e “imposiciones” a los ciudadanos. “Empieza la mentira y el gasto absurdo de dinero que no es suficiente para atender las verdaderas necesidades de los melillenses”, afirma José Miguel Tasende, presidente de VOX Melilla.

Lo cierto es que la lengua vernácula de Melilla es el español. “Pretender imponer otra lengua es ir directamente en contra del español”, asegura el dirigente de VOX Melilla para añadir: “Que una parte de los habitantes actuales de Melilla sean de origen rifeño no significa ni que estos conozcan una de las lenguas que se hablan en el Rif, ni que a estos les interese que sus hijos aprendan tamazigh en detrimento del español”.

Melilla es inequívocamente española, por eso en su historia y en su actualidad sociológica admite con éxito la coexistencia de grupos con diferentes tradiciones personales, como son los hebreos, que tan presentes están en la historia de nuestra Ciudad, los hindúes, los gitanos, los rifeños, cuyo número ha experimentado un rápido crecimiento en los últimos años, después de unas “muy discutibles nacionalizaciones” o la comunidad chinos, son cada vez más notorias.

Por otro lado, los cristianos, con el español como lengua y la tradición grecolatina, hispana y europea como cimiento de la cultura y de la convivencia “¿De qué tenemos que avergonzarnos?, ¿Quién ha hecho posible que todos podamos vivir en concordia? o ¿Para qué romper lo bueno que tenemos?”, cuestiona Tasende.

Y ahora viene un grupo pequeño, pero influyente en el “desgobierno” local, a imponer un nuevo orden: “Melilla ya no es España, Melilla ha pasado a ser una provincia del Rif con una lengua propia distinta del español y una tradición cultural diferente”, recalca el dirigente. “Quieren que los peninsulares dejen de venir a trabajar a Melilla”, asegura VOX Melilla para añadir que: “Para eso les ponen una traba adicional al escolarizar a sus hijos, pidiendo que estos tengan que aprender una lengua supuestamente autóctona”.

Al mismo tiempo, la CIM pide, “mejor dicho exige”, nacionalizar nada menos que a 2.000 residentes ilegales. Para VOX Melilla, “por burda que parezca la doble maniobra, siguen adelante con la misma, menos españoles de origen y muchas más nacionalizaciones irregulares”.