VOX no se adhiere a la moción conjunta en Móstoles por el 25N al no abordar aspectos fundamentales para combatir la violencia

López Divasson ha dejado claro que su formación política “jamás ha negado la violencia contra la mujer” y ha recordado que “VOX ha combatido y denunciado a los responsables de que en España aumente y sea cada vez un país más inseguro para las mujeres".

El Grupo Municipal VOX en el Ayuntamiento de Móstoles no se ha unido a la moción conjunta del resto de partidos políticos por el 25N “por no tener en cuenta aspectos muy importantes” para la formación política.

Así lo ha asegurado su portavoz, Maite López Divasson, durante el Pleno Ordinario de este jueves. “El propósito de VOX es proteger de forma inequívoca la integridad de la familia y de todos sus miembros: los hijos, hermanos, abuelos, parejas, poniendo coto a las agresiones que puedan llegar a producirse”, ha señalado y ha hecho hincapié en que “no sólo VOX jamás ha negado la existencia de la violencia contra la mujer, sino que además la ha combatido y denunciado  a los responsables de que en España aumente y sea cada vez un país más inseguro para las mujeres”. 

En esta línea, la portavoz de VOX ha mencionado los  aspectos fundamentales para combatir la violencia: 

  1. Garantizar toda la asistencia y apoyo posible a las mujeres víctimas de violencia, trabajando también en la prevención, identificando las causas y los perfiles repetidos de los agresores. Del mismo modo, apoyar y asistir a las víctimas de violencia doméstica, en especial a la que sufren las mujeres, los niños y los ancianos, incluyendo la elaboración de una Ley de Violencia Intrafamiliar.
  2. Pedir la derogación inmediata de la ley de violencia de género, la ley trans y la ley del sólo sí es sí, sustituyéndola por una que aumente las penas a todos los violadores, incluyendo la prisión permanente. Pedir también una bajada de la edad penal, y en cualquier caso una revisión de la ley del menor, para que se agraven las consecuencias a los menores que cometan este tipo de delitos.
  3. Ninguna mujer agredida debe verse menos acompañada o asistida en función del sexo del agresor. De igual modo, se pide que los hijos de una mujer asesinada no se vean discriminados en las ayudas a recibir por causa del sexo del asesino
  4. Exigir que se trabaje con especial atención para extirpar de nuestra sociedad los mensajes y discursos, civiles o religiosos, que promuevan o simplemente justifiquen la violencia contra la mujer.
  5. Exigir poner en marcha un estudio en profundidad sobre el aumento de las agresiones sexuales, en especial los aberrantes casos de violaciones grupales, para determinar sus causas y elaborar los perfiles repetidos de los agresores para poder combatirlos con más eficacia.
  6. En el acceso a la función pública, con especial atención a los puestos donde se priman las condiciones físicas, así como en los deportes, se vigilará que no se discrimine a ninguna mujer (ni mucho menos se ponga en peligro, caso de los deportes de contacto) ante hombres que se “autoperciban” mujeres y pretendan ocupar espacios reservados para ellas.
  7. Ningún hombre, independientemente del género con el que se autoperciba, podrá entrar en espacios de intimidad reservados a mujeres (vestuarios, baños, etcétera).

Una ley contra la violencia fallida 

Por otra parte, la portavoz de VOX ha criticado que “la Ley Integral Contra la Violencia de Género y el Pacto de Estado que la acompaña no implementan medidas realmente eficaces y efectivas de protección a la mujer”. 

Los verdaderos problemas que afectan a las mujeres quedan sin resolver: la inseguridad creciente, provocada por la degradación de nuestras calles y barrios; la emergencia social que han traído la subida de los precios y de los costes de los suministros; la precariedad laboral, en un país donde no se crea empleo de calidad y los impuestos no dejan de subir; o la brecha maternal, que penaliza a las mujeres que desean ser madres en un país que padece una severa crisis demográfica”, ha concluido.