Todos los partidos menos VOX votan en contra de eliminar la cuota autonómica del IRPF para ahorrar 5.200 euros de media a las familias catalanas. Así lo ha solicitado el partido en su moción en la que pedía también bonificar en un 99% el impuesto de sucesiones y donaciones. Según Joan Garriga, portavoz de VOX en el Parlamento de Cataluña, esta región “tiene la presión fiscal más alta de España para mantener sus despilfarros y gastos políticos”.
Según el partido, mientras la exclusión social y la pobreza afecta a más de 1 millón de personas, los alquileres suben de media un 4%, la huída de empresa no cesa, el precio de la leche ha subido un 25%, el pan un 14% o la luz un 32%, “Cataluña se gasta 18.000 millones de euros en gasto improductivo”.
Por esta razón desde VOX aseguran que “eliminando este gasto se podría prescindir del tramo autonómico del IRPF que supone para el gobierno catalán un ingreso de 9.929 millones de euros”. Además, asegura Juan Garriga, “suprimiendo la cuota autonómica del IRPF, las familias trabajadoras deben pagar menos impuestos, lo que implica que puedan tener más recursos para pagar las facturas”.
El partido también solicita que se bonifiquen al máximo los impuestos de sucesiones y donaciones por los que la Generalitat recauda 780 millones de euros. Este impuesto, afirma Joan Garriga, “significa el chocolate del loro de los presupuestos del Govern pero que supone una injusticia y un abuso para los catalanes”.
