El senador de VOX Jacobo González-Robatto se ha referido hoy a la necesidad de adaptar el Código Penal para hacer frente a la amenaza separatista, que, ha recordado, «sigue viva y alentada por el Gobierno de la Nación de una manera activa». Así se ha manifestado durante el debate, en el Pleno del Senado, de la Proposición de Ley Orgánica de Modificación de Ley Orgánica 10/1995, de 23 de noviembre del Código Penal, para la que VOX ha propuesto un texto alternativo.
El senador ha puesto el ejemplo de Portugal, donde se castiga como traidor a la patria a quien por medio de usurpación o abuso de funciones de soberanía pretenda, entre otros fines, la separación del territorio portugués.
Así, ha denunciado que en España «seguimos poniendo trabas a una legislación sabiendo que quienes sustentan el trono socialista no son otros que los que cometen estos delitos y tienen la poca vergüenza de llamarlo atentado contra la democracia, presos políticos y demás sandeces».
El senador ha denunciado que la gravedad de este delito «no ha encontrado una correlativa solución por parte de la Ley que responda de una manera eficaz, disuasoria y satisfactoria», y ha pedido que se tengan en cuenta las «las nuevas formas en las que se ha ido ejecutando dicho delito que atenta contra los elementos esenciales de nuestra convivencia y el orden constitucional».
Moneda de cambio
De este modo, ha explicado que » las nuevas formas de alzamiento o rebelión que amenazan a nuestra soberanía popular, hacen que sea más necesario que nunca un reforzamiento del Estado para poder sancionar proporcionalmente a quienes pretenden acabar con el orden constitucional, ya que el delito de rebelión es el más grave ataque al Estado de derecho y a la democracia que se pueda cometer».
Durante su intervención en la tribuna del Senado, se ha referido al intento de secesión de Cataluña en Octubre de 2017, un intento y golpe «que pudo haberse afrontado con la contundencia que requería de haber contado con los instrumentos y los avances en este sentido que sí presentan los códigos penales de otros países de nuestro entorno y que sin embargo son inexistentes en el nuestro».
González-Robatto ha lamentado que» la unidad nacional e indisoluble, la solidaridad entre las regiones y la lealtad constitucional implícita en nuestra Constitución han sido sistemáticamente ignorados y maltratados», y ha explicado que «no puede convertirse en moneda de cambio ni mercancía electoral para satisfacer los deseos de quienes basan su existencia política en la destrucción de la nación y la ruptura del orden que hace posible que podamos hablar de una España unida y fuerte frente a quienes quieren destruirla».
«Ello pasa-ha explicado el senador- por poner a disposición del Poder Judicial un sistema legal que garantice resoluciones judiciales previsibles que sean vistas en la sociedad como justas y proporcionadas a la gravedad de los hechos cometidos, y disuadir a aquellas personas que pretendan acabar unilateralmente con la soberanía española, la democracia o la indisoluble unidad de la Nación mediante procedimientos ilegales».