Macario Valpuesta, diputado de VOX y portavoz en la Comisión de Educación, ha pedido al consejero Javier Imbroda que aplique los cambios necesarios para que la enseñanza deje de ser «otro cortijo de la izquierda». Valpuesta ha comenzado su intervención solicitando que se «intensifiquen» las contrataciones de los profesores, «mejorando la agilidad en las sustituciones cuando se producen bajas por contingencias laborales». Igualmente, ha reclamado la necesidad de ir relajando la obligatoriedad de uso de la mascarilla a los menores de doce años.
Macario Valpuesta ha urgido al consejero de Educación a afrontar retos fundamentales para distinguir en algo su gestión a la de la época socialista. «Existen también otros asuntos de gestión muy mejorables, como es el retraso en los pagos a los centros de educación infantil, centros que, por cierto, siguen pasándolo muy mal y corren peligro de cierre. Las empresas de transporte escolar también se quejan de morosidad pública. Se supone que esto de gestionar es su punto fuerte con respecto a la etapa socialista».
El parlamentario de VOX ha advertido del peligro que supone la «dramática bajada de natalidad» para la educación. «Nos estamos acercando a una escuela casi con más maestros que alumnos. Eso va a ser, de aquí a pocos años, sencillamente insostenible; y habrá que cerrar líneas y centros de forma masiva; aunque, al parecer, la izquierda se contenta con que sean los concertados los primeros que caigan».
Macario Valpuesta también ha destacado la importancia de trabajar para «aumentar los índices de excelencia y calidad, a fin de revertir los pobres resultados obtenidos según el programa PISA en Andalucía con respecto al manejo de las competencias básicas. La escuela andaluza necesita más rigor y seriedad, y menos ideología, en un mundo globalizado y cada vez más exigente, en el que la competitividad en los hábitos de trabajo y en las destrezas básicas van a ser las principales herramientas que permitirán a los alumnos prosperar en la vida y hacer una aportación valiosa al bien común».
Igualmente, ha reclamado acabar con la «celebración sectaria y mentirosa de la llamada Memoria Histórica». «Sobran asimismo todos los excesos nacionalistas y anti-españoles de la ideología blasinfantista que, con la excusa de celebrar a cierta Andalucía, olvida a sus grandes representantes, desde Murillo a Catalina de Mendoza (la fundadora de esta sede); de Bécquer a Juan Valera; de Falla a María Zambrano. Ninguno de esos andaluces necesitó el andalucismo para ser reconocidos». «En la escuela andaluza sobra esa imposición coactiva de la ideología de género que se ha convertido en una verdadera religión laica de Estado profesada por la izquierda y aceptada por ustedes, no se sabe si por convicción o para ahorrarse problemas».
Por último, el parlamentario de VOX lamentó «la nula voluntad de su consejería de respetar el derecho constitucional de los padres a ser los principales titulares de la educación de sus hijos».